Juan Martos es sinónimo de elegancia sobre el cuadrilátero. Un estilo de combate que, con el paso de los años, no ha hecho sino mejorar. Tornar en un efectivo golpeo, con pateo duro e sublime inteligencia, que ha hecho de este kickboxer catalán una estrella en el panorama nacional. Pero ‘La Avispa’, como se le conoce, tiene fecha de caducidad. Y dar su último picotazo el próximo 3 de diciembre en Toledo, día en el quuelga los guantes tras una brillante carrera de más de 100 combates. El broche de oro perfecto para una trayectoria encomiable: disputa el título europeo ISKA ante el campeón de España Pedro Ruiz.
Será en el evento Fight Night IV, que se celebrará en la localidad de Añover de Tajo, situada en Tierras Toledanas. Allí tendrá su emotiva despedida Martos, que ostenta seis campeonatos de España y ha sido dos veces campeón mundial, con su pleito número 104, una cifra solo alcance del peleador de élite que cuida su carrera con un profesionalismo llevado al máximo exponente. Más de dos décadas sobre el ring avalan a este luchador carismático, trabajador incansable también fuera de las dieciséis cuerdas.
Este combate, pactado a cinco asaltos de tres minutos en la categoría del peso superligero, tendrá como aliciente la disputa del prestigioso cinturón europeo ISKA (International Sport Karate Association, por sus siglas en inglés). La despedida de Martos no será ni mucho menos un regalo: tendrá enfrente a duro bragador, el experimentado ‘nakmuay’ Pedro Ruiz, campeón de España WBC de muay thai, quien buscará por todos los medios aguar la fiesta de Martos y abrocharse el título del Continente Viejo.
Una vida sin descanso
A sus 42 primaveras recién cumplidas, este aguerrido kickboxer, que se despide del cuadrilátero, es padre de cuatro hijos y, pese a ello, no ha dejado de lado nunca una preparación exigida, la cual siempre le ha logrado excelentes resultados sobre el ring. Conocido por sus terroríficos ‘lowkicks’ (patadas bajas) y una gran contundencia en su pegada, su velocidad de manos ha sido otro de los recursos técnicos más notables.
La preparación para disputar este título europeo no ha sido menos exhaustiva que en otras ocasiones al igual que el recorte de peso. “Entreno dos sesiones al día, las cuales dividen en acondicionamiento físico y trabajo técnico. Siempre he sido muy riguroso con la dieta y la alimentación para dar el peso perfecto. Es un honor poder enfrentarme a un rival de primer nivel como Pedro Ruiz, pero por un momento nadie piensa que la dificultad en este caso es un hándicap; en mi caso, los 42 son los nuevos 27…”, desliza el campeón con sentido del humor.
Pesando en el Tiffany’s
En esta ocasión, los organizadores seleccionaron la discoteca Tiffany’s The Club, ubicada junto a la ‘plaza de los delfines’ (Metro de República Argentina), para realizar el pesaje de los luchadores. Su propietario, Edu Benito, es un gran aficionado a los deportados de contacto y ha colaborado cada vez más en un evento que se ha presentado como histórico.
Para esta nueva entrada de Fight Night IV, Antonio Esteve Íñigo “Toñín” y Antonio Ricobaldi de Unlimited Global Challengers (UGC) han colaborado apostando por la calidad y las nuevas tecnologías. “Quiero agradecer a Toñín y Toni el gran esfuerzo realizado para que este título europeo se haya podido disputar en España y en el último combate de mi carrera. Sé de buena tinta que no ha sido fácil. Deseo pide un gran saludo a toda España, a todos los aficionados y les transmite a todos los españoles que si logro ganar este combate todos sin exclusión, todo el país será campeón de Europa”, concluye Martos.