El próximo encuentro entre don Juan Carlos de Borbón y su hija, la infanta Cristina, fue objeto de parte del encuentro en la sección «Frescos» de «Ya es mediodía». Alba Carrillo, Marta López y Miguel Ángel Nicolás, presentados por Sonsoles Ónega, explicaron cómo imaginaban que se produciría este encuentro, que sería el primero tras la interrupción del matrimonio, entre la hija del Rey e Iñaki Urdangarin, pero tienen tanto dicha superposición tuvo que intervenir otro colaborador -fuera del plató-. Fue Rosa Benito, la tía de Rocío Carrasco, quien ordenó a la presentadora que pusiera en orden su plató.
«Ya es mediodía», que desveló la semana pasada quién mandó a por las fotos de Iñaki Urdagarin y Ainhoa Armentia
estuvo en su parte ‘Fresca’ hablando del próximo encuentro que tendrá don Juan Carlos con la infanta Cristina. Todos los colaboradores dieron su opinión con mucha pasión y no esperaron su turno para responder, sino que se cubrieron unos a otros.
La infidelidad de Urdangarin
En este debate, Alba Carrillo, por ejemplo, se preguntaba cómo consolaría don Juan Carlos a la infanta tras la infidelidad de su marido, poniendo el punto de comparación en su padre. “Mi padre compra comida rápida y helados, y vemos una película juntos”, comentó el colaborador, mientras Miguel Ángel Nicolás los veía tomando algo saludable. Fue en ese momento cuando Sonsoles Ónega interrumpió el debate para leer un mensaje que le había llegado de Rosa Benito, que desde el exterior le decía que pusiera orden en el programa porque no se entendía nada de lo que hablaban. “Por favor, Rosa Benito dice que no se entiende nada, se grita por detrás… se pisan y si Rosa no entiende nada, nadie entiende nada porque Rosa es el pueblo”.
La reacción de las personas mencionadas no se hizo esperar, siendo Alba Carrillo la que más se dirigió a Rosa Benito, señalando primero que el motivo del despertar de la tía de Rocío Carrasco era porque quería venir también hoy. Está celosa”, dijo con sarcasmo la exmodelo, para luego mostrar su disconformidad con la actitud de Benito: “Ahora lo que necesitábamos era que él dirigiera el programa desde su casa, nos deja en paz”.