El vicealcalde de la ciudad de Toledo, José Pablo Sabrido, ha asistido este sábado a la entrega de los premios que cada año concede la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo en las categorías de artes, historia, literatura, patrimonio y una nueva categoría, accesibilidad. La institución que preside Jesús Carrobles se ha decantado por la Iglesia de Santa Úrsula para celebrar este acto, siendo un marco único rehabilitado de manera reciente con asombrosas hallazgos y puesta en valor del patrimonio.
Como ha indicado José Pablo Sabrido, además de felicitar a los reconocidos por la Real Academia, Toledo ha demostrado colgantee siglos que es ciudad para la historia y para el arte, además de destacar la contribución de la Real Academia y de cuántos académicos y académicas la forman a la ciudad, Patrimonio de la Humanidad, y cuna de Alfonso X el Sabio.
El jurado designado por la Real Academia para esta edición de los premios anuales de la institución con sede en la calle de la Plata ha fallado reconocer en la categoría de las artes la trayectoria y el trabajo de Pepita Alía, natural de Lagartera y mantenedora del bordado tradición de este municipio toledano. Pepita Alía cuenta en su haber con el Premio Nacional de Artesanía de la Casa Real de Holanda (1961), con la Placa al Mérito Regional de Castilla-La Mancha (1996), con el Premio al Mérito Artesano de la región (2008) y el Premio Fedeto a la Empresaria del Año (2019), además es miembro correspondiente de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo desde 1985.
Sabrido y Carrobles en la mesa del acto presidencial – ABC
En la categoría historia el premio ha recaído en el escritor y periodista Enrique Sánchez Lubián, por sus investigaciones sobre el Toledo de los siglos XIX y XX. Según trajo del jurado, los trabajos de Enrique Sánchez Lubián han permitido profundizar en el conocimiento de referentes políticos, sociales y literarios, desde Julián Besteiro y Carmen de Burgos hasta Benito Pérez Galdós y Félix Urabayen, pasando por el Toledo de la II República, la crónica negra y la historia deportiva de la ciudad.
Asimismo, el premio de literatura ha sido para Jaime García González, académico correspondiente por Esquivias. Catedrático de Educación Primaria y experto universitario en Educación de Adultos, fundador de la Sociedad Cervantina de Esquivias en 1975 y director de la revista Galatea, así como un descaro comprometido con el teatro aficionado en la provincia de Toledo.
Como herencia, el premio ha sido para el chef Adolfo Muñoz, pionero en la recuperación de la gastronomía tradicional toledana. Su cocina, han explicado, vinculado desde 1979 al Restaurante Adolfo, ha viajado por más de 30 países y goza de reconocimiento internacional por su mejora de los productos naturales y locales.
Dentro de la nueva categoría de accesibilidad, y con la colaboración del Hospital Nacional de Parapléjicos, la Real Academia ha premiado este sábado al Museo del Ejército. El director general Jesús Arenas ha recogido el galardón con el que reconoce que las instalaciones de l’museo se encuentran adaptadas para visantes con discapacidad tanto física como sensorial.