La Abogacía entrega sus III Premios Igualdad · Noticias Jurídicas

El Consejo General de la Abogacía ha entregado sus III Premios Igualdad a la abogada y feminista española Ángela Cerrillos, a la presidenta del Tribunal Supremo de Puerto Rico Maite Oronoz y, a título póstumo, a María Alfonsa Aragón, la primera abogada que ejerció el cargo del juego en España.

Los galardones, concedidos para reconocer a quienes desde la abogacía trabajan a favor de la igualdad de género, se entregaron en el marco de una jornada en la que reivindicó la necesidad de avanzar hacia la igualdad real.

“Avanzamos, pero muy despacio. Es imprescindible ir cerrando brechas”, afirmó en la toma de posesión la presidenta de la abogacía, Victoria Ortega, quien se refirió a la pérdida de la corresponsabilidad y el incumplimiento del salario y subrayó el compromiso de la abogacía en esta lucha.

“Estamos ante una deuda histórica, es inaceptable que en el siglo XXI persistiera la desigualdad y la invisibilidad de las mujeres”, dijo Ander Gil, presidente del Senado, quien también intervino en la inauguración del acto. “La desigualdad es algo estructural de un sistema patriarcal que descalifica a las mujeres para el espacio público”.

“¿Por qué las mujeres siguen siendo mínimas en los alrededores de poder del Derecho? Falta mucho para que en nuestra sociedad haya igualdad en la cúpula del Derecho y el sector jurídico. Sin igualdad entre quienes imparten justicia no hay igualdad entre quienes se ven afectados en sus decisiones”, agregó.

Las mujeres actualmente representan más del 58% de los estudiantes en las facultades de derecho, y un 44% de los abogados ejercientes. Sin embargo, su presencia disminuirá progresivamente en los medios que suban en el escalafón: solo hay un 20% de socias en los despachos y de los 83 Colegios de la Abogacía solamente 20 tienen una decana al frente.

“La lucha por la igualdad ha sido una lucha colectiva, por eso este es un premio compartido”, confirmó Ángela Cerrillos, que fue presidenta de la asociación de Mujeres Juristas Themis, y quien tras recoger el premio de manos de Francisco Marín, presidente del Corte Suprema, registró a las diferentes mujeres con las que trabajaron para conseguir la modificación de leyes qu’perpetuaban la déigualdad.

“Ser mujer en la abogacía y la judicatura es un esfuerzo constante y una lucha doble por hacer valer nuestros derechos. La igualdad tiene que ser la norma. Continuó promoviendo una justicia con perspectiva de género, es decir, que se aplique el Derecho desprovisto de sesgos. Tenemos que usar como instrumento de justicia y equidad. Ese es y será mi norte”, confirmó Maite Oronoz, quien recibió el premio de manos de manos de María Luisa Segoviano, magistrada del Tribunal Constitucional.

El decano del Colegio de Abogados de Lorca, Ángel García Aragón, hijo de Alfonsa Aragón, fallecida en 2021, reconoció el galardón postumo para su madre de manos de Gloria Elizo, vicepresidenta tercera del Congreso de los Diputados.

En la jornada hubo también una mesa redonda sobre lenguaje inclusivo. Susana Guerrero, catedrática de Lengua Española en la Universidad de Málaga, explicó “las lenguas vivas cambian por sí mismas para adaptarse a la realidad, si la realidad se dédoubla el lenguaje también”. La lingüista Carme Junyent mostró en contra del desdoblamiento que “no hay un solo ejemplo de que cambiando la lingua cambie la realidad”. Y Fernando Garea, periodista y expresidente de la agencia EFE, aseguró que “el primer paso para combatir la desigualdad y el machismo es el lenguaje” y pidió esfuerzo para combatir los estereotipos y visibilizar a las mujeres.

En la segunda mesa redonda, moderada también por el periodista de RTVE Sergio Martín, debate sobrio si existe un nuevo feminismo con Carmen Calvo, presidenta de la Comisión de Igualdad del Congreso de los Diputados, Javier Padilla, diputado autonómico de Mas Madrid y Margarita Sánchez Romero, catedrático de prehistoria en la Universidad de Granada. Todos coincidieron en que no hay un nuevo feminismo, pero sí que hay nuevos actores en el debate, y señalaron la importancia de que se involucren los hombres. “Esto debe ser una construcción de la igualdad y los hombres tienen que estar”, afirmó la historiadora Marga Sánchez. Padilla dijo que “el feminismo a día de hoy es el verdadero horizonte que planta una sociedad mejor para todos y todas y cada uno debe hacerse cargo de su papel”. Y aseguró que “es necesario construir una masculinidad que se defina más por cómo cuida a sus hijos que por hacer horas extras en la farmacia. Tenemos que hacernos cargo de nuestra parte en los cuidados, del 50%”.

“Los hombres van muy tarde, no han oído que el feminismo era también su trabajo como demócratas. La invita a revisar, desde la política hasta lo personal y psicológico, adecuadas son los cambios que tienen que hacer”, dijo Carmen Calvo, quien aseveró que “la sostenibilidad del sistema democrático va a pasar por eso hacia la resolución de nuestros problemas” .

El jurado ha estado compuesto por Victoria Ortega, Marga Cerro González, presidenta de la Comisión de Igualdad de la Abogacía Española; Octavio Salazar Benítez, catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de Córdoba; Enrique Sanz Fernández-Lomana, presidente de la Mutualidad de la Abogacía; María Luisa Segoviano Astaburuaga, magistrada del Tribunal Constitucional; José Soriano Poves, decano del Colegio de la Abogacía de Valencia y Javier Martín García, secretario general de la Abogacía Española.