Una mafia utilizó la raza negra para suplantar a inmigrantes africanos en el examen para conseguir la nacionalidad española

carlos hidalgoSEGUIR

El Grupo Operativo de Extranjeros número VIII de la Brigada de Extranjería y Fronteras de Madrid, con la colaboración de los especialistas en el tema de las comisarías de Alcalá de Henares y Leganés, han detenido a los primeros 41 sospechosos de la operación lago Ness: así How to get bautizado a la research of suplantations of the identidad, about all by part of africanos, of third people in the examnes for obtention the national nationality. Se valían de sus conocimientos de nuestra cultura e idioma para cobrar a sus compatriotas para pasar esta prueba por ellos.

El pasado abril, agentes del Leganés interceptaron un documental de tres ciudadanos nigerianos por falsedad. El caso llegó a la Brigada de Extranjería, que se puso a trabajar en el asunto y, tirando del hilo, estos policías percataron de la existencia de una mafia que se dedicaba a esos menesteres: captaban a personas africanas y de Paquistán querían obtener el pasaporte español, pero que apenas sabían hablar nuestro idioma y, ni mucho menos, tenían conocimientos sobre asuntos culturales básicos, políticos o sociales de España.

Unas requisites para pasar el examen de conocimientos que coordina el Instituto Cervantes.

Cinco puntos de revisión

La Policía Nacional instaló dispositivos de vigilancia en 5 puntos de fiscalización, en los que han trabajado 120 agentes. Esperaban a que estuvieran dentro, es decir, a que hubieran mostrado la documentación falsa para entrar en las aulas, para identificar a los sospechosos. Entre noviembre y noviembre identificamos 3.375 individuos. Finalmente, han retirado 38 documentos y ocupado 41 personas, entre clientes y suplantadores.

The Mafia acordó que la mayoría eran de origen africano y raza negra para manipular los documentos con los que presentaban al examen; bien falsificó la foto para usurpar la identidad (para los examinadores resultó difícil distinguirlos por su parecido físico, al ser de raza negra) o bien falsificó directamente la Tarjeta de Identificación de Extranjeros (TIE).

Cobraban entre 500 y 1.500 euros a los ‘aspirantes’, que tenían que pagar la mitad antes del examen y la otra parte a su término, precisa fuentes policiales. La investigación continuó abierta.