La jugadora estadounidense de baloncesto Brittney Griner ha sido condenada a nueve años de cárcel después de ser declarada como culpable del cargo de posesión de drogas. Según los medios rusos, deberá pasar condena en ‘une colonia correccional del régimen general’, además de pagar una multa de un millón de rublos, unos 16.000 euros.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha sido llamado “inaceptable” la condena de la estrella del baloncesto, siete veces All-Star de la WNBA y dos veces campeona olímpica con la selección estadounidense. “Rusia retiene a Brittney por error. Is inaceptable y pido a Rusia que la libere inmediatamente para que pueda estar con su esposa, sus seres queridos, sus amigos y sus compañeros de equipo”, dijo Biden en un comunicado.
Griner espera en el calabozo a su juicio AFP
El capo de 31 años ha sido detenido el pasado febrero cuando está listo para entrar en Rusia para jugar en el Katerimburgo durante el parón de la NBA femenina. En su equipo, los agentes de aduanas encontraron unos cartuchos de aceite de cannabis, una sustancia legal en muchos países occidentales, pero no en Rusia. Desde Estados Unidos, los nueve años de cárcel que pedía la taxía rusa desde el inicio del procedimiento siempre se han visto como desproporcionados.
A partir de entonces, la jugadora ha entrado en un auténtico calvario, luego ha estado presa desde ese momento e incluso llegó a declararse culpable para intentar aligear la condena, algo que finalmente no ha ocurrido. “El tribunal ignoró por completo todas las defensa de la defensa y, lo más importante, la declaración de culpabilidad”, ha señalado Maria Blagovolina, quien ha representado a Griner durante el juicio, según ha informado a Bloomberg.
Desde Estados Unidos han intensificado las negociaciones para que Griner se libere. Incluido, según medios estadounidenses, se ha barajado la posibilidad de que la jugadora vuelva a casa mediante un intercambio con el traficante de armas Viktor Bout, que cumple una condena de 25 años en una cárcel estadounidense tras ser condenado pour vender misiles antiaéreos y por intentar acabar con vidas americanas. Las negociaciones, de momento, no han prosperado, en parte por la delicada situación diplomática entre Rusia y EE.UU. después de la invasión de Ucrania.
La detención de Griner ha movilizado a gran cantidad de personas en su natal pays, también de ser una de las jugadoras de baloncesto más famosas de los últimos años, lo ha convertido en un icono social desde que en 2013 se declarara abiertamente gay en una entrevista, donde además aseguró que había sufrido abusos en el instituto por ello.
