20/07/2022
Actualizado el 21/07/2022 a las 12:27
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Luces y sombras en el balance que hicieron ayer fuentes de Protección Civil sobre esta bocanada de llamas que ha dejado parajes ennegrecidos por todo el país. El respiro en la meteorología permitió rebajar a una docena de los incendios activos, controlando otros tres y dando por estabilizado el número 16 de los fuegos que requirieron más esfuerzos. Las malas noticias: es uno de los veranos más complicados en quince años, el recuento aún provisional de superficie quemada no es inferior a 60.000 ha, sumadas a las 73.000 del último balance de Protección Civil del 10 de julio. Pero en realidad, según datos del organismo EFFIS (siglas en inglés del Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales) basado en imágenes por satélite, los incendios han arrasado ya este año 193.247 hectáreas forestales, con lo que en poco más de seis meses y medio se han superado los datos de 2012, año en el que ardieron 189,376 hectáreas. España es el país más afectado por Europa, por acuerdo con EFFIS.
Y eso pesa al ‘optimismo’ en la cifra que manejaba 24 horas antes la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, en su comparecencia semanal en La Moncloa. Rodríguez minimizó el impacto de los nuevos días de ola de calor a 20,000 hectáreas perdidas, lo cual dista de ser un dato actualizado. Solo entre las provincias de Galicia, Lugo y Orense, computan más de 24.000 hectáreas reducidas a cenizas. Rodríguez asumió: “Se trata de un verano trágico que hace que tengamos que replantearnos la respuesta a los incendios”. Hoy el Gobierno se acercó a los sindicatos si es necesario actualizar los protocolos en el nuevo Marco Regulador Estatal Básico para el personal de prevención y extinción de incendios.
La campaña pinta muy mal
Conforme al Informe de Balance de la Situación de los incendios actuales que dio el martes el Consejo de Ministros, por los incendios –no estaban aún por ejemplo los residentes en los municipios que durmieron por la noche en un pabellón de Calatayud (Zaragoza)– han tenido que ser evacuadas 8.000 personas.
Hay seis comunidades que han resultado especialmente golpeadas por la virulencia de los fuegos: Galicia, Castilla y León, Aragón, Extremadura, Cataluña y Castilla-La Mancha. “La campaña pinta muy mal”, dijo ayer el capitán y analista de riesgos naturales de la Unidad Militar de Emergencias (UME), Roberto García.
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