entregarán más material y adiestrará tropas

El Gobierno de Sánchez reaccionó a las críticas del embajador de Ucrania en España, Serhii Pohoreltsev, quien volvió a reiterar la insatisfacción de su país con la contribución de nuestro al esfuerzo ucraniano. El Ministerio de Defensa se lanzó con el afán de anunciar la entrega de un importante conjunto de material bélico, principalmente una veta de vehículos acorazados y municiones. Además, España se ha comprometido a colaborar en el adiestramiento de tropas, enviando instructores “allí” donde Ucrania lo requiera, según señalaron fuentes del departamento de Margarita Robles a ABC.

La reacción de Defensa se produce tras las severas críticas que el representante diplomático realizó ayer y coincidiendo con la conmemoración de los sextos de la guerra en Ucrania y el día que se independizó de la Unión Soviética, desde hace 31 años.

Entre el material que se enviará a Ucrania para luchar contra las fuerzas rusas se encuentra artillería de campaña con capacidad de más de mil disparos de gran alcance. Los veinte TOA M-113 del Ejército de Tierra que anunció el Ministro Robles a principios de este mes están incluidos en esta serie de envíos que comenzarán, en principio, en septiembre. España prevé retirar del servicio 650 unidades a partir de 2035.

Nuestro país entrará en un sistema de misiles de defensa Nasams “a punto y a disposición de las autoridades ucranianas”. Según fuentes del Ministerio de Defensa, el material enviado será donado, tal y como pidió a kyiv, y que España pertenece al “grupo de donantes” para ayudar al país en defensa de su territorio frente a la invasión rusa. Junto al material armamentístico, se enviarán mil toneladas de diésel por importación superior a dos millones de euros y más de 60.000 piezas de vestuario y equipamiento para combatir la llegada del invierno.

Una ayuda que no llega

Este nuevo esfuerzo de España alega un retraso. Pese a los múltiples anuncios, el Ejecutivo de Sánchez lleva más de tres meses sin suministro de ayuda militar a Ucrania. El último envío data del 4 de agosto y consistió en dos toneladas de raciones de combate que sirvieron para alimentar a las tropas ucranianas, pero no suplieron el armamento belico pesado prometido desde el inicio de la contienda.

Durante este período de guerra, el Ministerio de Defensa se ha caracterizado por mantener una falta de transparencia de tal manera que los envíos militares solo tienen a los ucranianos a través de “áreas estrictas de seguridad”, pero desde este departamento insistieron en decir que “en todo este tiempo, nuestro país no ha dejado de enviar material defensivo y ofensivo”. No obstante, datos del Instituto Kiel y del centro de investigación SIPRI sitúan a España como el quinto país que menos ayuda a Ucrania de las 37 potencias que lo hacen: apenas ha dedicado el 0,3% de su presupuesto de Defensa.

El transports acorazado estadounidense M-113 lleva en servicio 60 años; España prevé alargar su vida útil más allá de 2035

“Estos seis meses han demostrado que Ucrania no solo ha resistido, sino que va a ganar y va a aguantar hasta la victoria”. Así comenzó el discurso del embajador ucraniano en España Serhii Pohoreltsev con motivo del 31 aniversario de la independencia de la Unión Soviética antigua.

Para kyiv, “la palabra de Putin no vale nada”, así que solo les queda defenderse. Pohoreltsev insistió en la necesidad de suministro de armamento pesado español al pueblo ucraniano, dejando claro que agradecen a las autoridades la ayuda recibida, pero que no puede decir que están “satisfechos” con lo aportado hasta la fecha, ya que no tienen “todo lo necesario’ o ‘todo lo que España podría haber sido capaz de dar’. “Si tuviéramos todo ese armamento pesado, pudimos ganar más rápido la guerra y recuperar todos los territorios”, apuntó a modo de reprimenda. “Lo ideal sería conseguir ayuda militar gratuita”, aunque no descartan otras opciones como la compra de tanques. El diplomático insistió en que España no ha entregado material militar alguno desde principios de mayo.

falsas esperanzas

El pasado martes, Robles adelantó que Ucrania está interesada en comprar cuerpos de combate tipo Leopard «modernos», entre otros, en España y ante la previsión de que la guerra será «grande, muy difícil y cruel». Como respuesta a las recientes críticas del PP debido a los ya mencionados retrasos en el envío de tanques, Robles pidió “máxima prudencia y discreción”, además de asegurar que “la colaboración de España es absoluta, total”. Mientras tanto, los populares expresaron su preocupación por que España se convirtió en el “hazmerreír internacional”.

equipo prometido

Vehiculos acorazados

España entregará veinte vehículos acorazados TOA APC M-113 en buen estado de funcionamiento. Irán acompañada de la entrega de mil toneladas de gasóleo valoradas en 2,5 millones de euros.

Adiestramiento

Está prevista la preparación de adiestradores españoles, así como de distintos módulos de adiestramiento prioritarios para las Fuerzas Armadas ucranianas. Una tarea susceptible de ser incluida en la posible futura misión de la UE.

Artillería de Campana

Las autoridades ucranianas tienen a disposición desde el pasado 17 de agosto una base española y dispuestas para su entrega, más de mil disparos completos de munición de largo alcance.

Vestido de invierno

Además del material de combate, se aportará un importante cargamento de 30.000 uniformes y equipamiento adicional para el frío (15.600 c/u y 15.000 viajes de intemperie).

No es la primera vez que Defensa justificó el retraso del envío de armamento pesado. El pasado 2 de agosto, Ucrania recibió un nuevo jarro de agua fría: el ministro confirmó durante su visita a la base aérea de Torrejón que los Leopardos –almacenados en Zaragoza desde hace una década– que se averiaron estaban en un estado “lamentable”. aunque abrió la puerta a la donación de la veintena de vehículos blindados TOA qu’anunciaron ayer.

Al episodio de los carros de combate Leopard a finale de julio hay que sumarle las 200 toneladas de munición que apenas duraron “para dos horas de combates intensos” or la llegada del buque Ysabel con solamente 30 camiones y una decena de vehículos armados ligeros.