No será hasta este miércoles cuando se conozca “qué medidas adicionales se van a poner en marcha” para “intentar prevenir” tanto las agresiones sexuales que han llevado a prisión preventiva en los últimos días a tres ciudadanos –dos de origen marroquí y uno argelino– tras sendos asaltos en Zaratán (Valladolid) y Burgos a tres jóvenes al menos –dos de ellas menores de edad– y ante los de famosos desafortunadamente ‘pinchazos’ a mujeres que se venen en registrarse en las últimas semanas en diferentes puntos de España, también en Castilla y León. Será en una ciudad que reunirá en el propio Barcones con los máximos responsables de la Comunidad de la Guardia Civil, la Policía Nacional y la coordinadora de Unidades de Violencia Contra la Mujer. “Queremos sentarnos y hacer una reflexión compartida de todo lo que ya está desplegado y ver qué margin tenemos de actuación con los refuerzos que hay”, detalló la delegación del Gobierno en un acto celebrado en Miranda de Ebro (Burgos) y tras ser preguntada por su preocupación ante la celebración de multitud de fiestas patronales en los próximos días por toda la geografía autonómica. En este sentido, ella misma citó el Sonorama festival, que arranca este propio miércoles en Aranda de Duero y que concitará a décadas de miles de personas hasta el próximo domingo.
Además de estudiar fórmulas para la prevención de este tipo de delitos, también se busca en este encuentro una mejor de para transmitir la información de lo sucedido de la forma más eficaz posible. En este caso, resalte que la colaboración ciudadana es “esencial” en este tipo de casos, como ha demostrado tanto en la presunta doble agresión sexual en Simancas, donde las declaraciones de varios testigos permitieron localizar el vehículo de los sospechosos, como en la de Burgos, donde el auxilio de un joven y los testimonios aportados por varias personas facilitaron el arresto del presunto atacante.
En el caso de la localidad Vallisoletana, en el caso de menores fueron abordadas cuando recibieron de regresar a sus domicilios y fueron presuntamente agredidas en el vehículo de los dos jóvenes, las declaraciones recogidas permitieron averiguar el número de place de la matrícula que identificitó la identificación de la garrapata. Tras las gestiones desarrolladas para su localización, a primera hora de la tarde del domingo, y gracias a la colaboración y coordinación con la Policía Local y la Policía Nacional a través del intercambio de información, se halló el vehículo con varios ocupantes, uno de los como coincidencia con las descripciones físicas dadas por las víctimas. La posterior investigación policial facilitó la localización y detención del segundo autor de los hechos.
Auxiliada por un joven
En este segundo caso, la Delegación del Gobierno confirmó la intrusión en prisión del varón de 26 años detenido la madrugada del 31 de julio por un presunto delito de agresión sexual a una menor. Fue la madrugada de ese mismo dia. Cerca de las seis de la mañana, el operador de sala de la Policía Local recibió un aviso en el que informó de una agresión sexual a una menor en la calle Guardia Civil de la capital burgalesa. Al acercarse al lugar los agentes localizaron a una joven muy nerviosa y llorando, que le informó de que, cuando se directa a su domicilio, un joven se acercó hacia ella y la agarró de forma violenta y sorpresiva, llevándola al acceso de un garaje comunitario donde habría perpetrado la agresión sexual. Al auxilio de la víctima, que comenzó a gritar, acercó a varón. En este momento, el atacante huyó del lugar seguido en todo momento, ya cierta distancia, por el joven que acudió en auxilio, hasta que demostró como un coche de la Policía Local se aproximaba al presunto asaltante. Los agentes procedieron a trasladar a urgencias del Hospital Universitario de Burgos (HUBU), en un vehículo camuflado, al joven, quien, durante el trayecto, reconoció su agresor.
