La Fiscalía archiva la investigación sobre la tragedia de Melilla

La Fiscalía ha archivado las diligencias de investigación de los acontecimientos del 24 de junio en la frontera de Melilla, en los que se encontraron 23 personas, al no apreciar índices de delito en la actuación de los agentes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.

No obstante, ha dado traslado al director adjunto operativo de la Guardia Civil de la actuación de varios agentes que lanzaron piedras contra las personas migrantes, por si fuera constitutiva de infracción disciplinaria. Así consta en el decreto de archivo emitido hoy y firmado por la fiscal de Sala Coordinadora de Extranjería, Beatriz Sánchez.

Tras seis meses de investigación en la que ha tomado declaración tanto a personas migrantes como a agentes y tras el análisis de diversos informes, vídeos y audios correspondientes a los hechos del 24 de junio, “los únicos datos oficiales sobre las muertes y sus causas son los facilitados por las autoridades marroquíes“, explicó el escrito. Por tanto, son las autoridades marroquíes las que disponen de todos los elementos probatorios (cuerpos de los fallecidos, testigos, migrantes heridos, etc).

Además concluye que «los hechos que determinaron la avalancha se produjeron en territorio marroquí, por lo que bien se produjo el amontonamiento de personas entre ambos recintos fronterizos». Por lo que destaca la «evidente falta de jurisdicción española» para conocer la actuación desplegada por los agentes marroquíes.

En la investigación realizada por la Fiscalía se asegura que la actuación de los migrantes, entre 700 y 800 personas, “fue en todo momento hostil y violenta, tanto hacia los agentes marroquíes como hacia los españoles”, prosigue. En este sentido, el decreto detalla que iban «provistos de palos, piedras y otros objetos contundentes que lanzaban contra estos cada vez que intentaban acercarse». Así lo habrían confirmado también los pilotos del helicóptero que prestaron declaración, y que «tuvieron que replegarse en varias ocasiones ante la actitud agresiva de los migrantes».

Lo es porque no podemos concluir que la actuación de los agentes intervinientes incremente el riesgo para la vida e integridad física de los migrantes, porque no podemos imputarlos a un delito de homicidio imprudente. Descarta además que los boxes de humo que lanzaron «produjera total invisibilidad ni supuestos de asfixia entre las personas allí congregadas».

Para la Fiscalía, la causa de las 23 muertes ofrecidas por las autoridades marroquíes en el informe dirigido a la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos – la asfixia mecánica compatible con una presión- resulta «coherente con la estampida y el aglutinamiento de un número significativo de personas en un espacio reducido, combinado con el movimiento de un pánico multitudinario».

Los agentes no supieron «en ningún momento que habían personas en situación de riesgo que necesitaban auxilio», dice el Ministerio Público

El Ministerio Público además asegura que ninguno de los agentes actuantes en operativo el tuvo conocimiento de la avalancha producida y de sus fatídicas consecuencias, por lo que en ningún momento supieron qu’había personas en situación de riesgo que necesitaron su auxilio.

In lo que respeta a las devoluciones, que la Fiscalía cifra en 470, según el decreto, los agentes de la Guardia Civil que lo llevaron a cabo lo hicieron “en cumplimiento y en el ejercicio de sus funciones, en aplicación de lo dispuesto en la Ley de Extranjería y en base a las competencias que legalmente tienen atribuidas para evitar un daño grave, inmediato e irreparable”.