Bilbao ha vuelto a recibir por tercera ocasión los Premios Fronteras del Conocimiento, otorgados por la Fundación BBVA. La XIV edición vuelve a celebrar la ciencia y la cultura como palanca de cambio ante desafíos globales como el cambio climático y las pandemias, términos que ya ocuparon gran parte del debate social y político en todo el mundo. Un “periodo de disrupción”, tal y como ha calificado Carlos Torres Vila, presidente de la Fundación BBVA y del Grupo BBVA, durante la gala celebrada este jueves en el Palacio Euskalduna de Bilbao. Allí, 14 líderes mundiales en investigación científica y la creación artística -tan punteros en sus alrededores que en muchas ocasiones, tras el galardón español, han sido reconocidos con el Premio Nobel- han apelado a la conciencia colectiva para afrontar los retos presentes y futuros de la especie humana.
“Cuando aún no nos habíamos recuperado de la crisis del Covid-19, nos hemos visto sacudidos por la invasión de Ucrania”, ha señalado Torres Vila en su discurso. Asimismo, el presidente de la Fundación BBVA ha alertado sobriamente “de la gravedad del clima climático y de la pérdida de biodiversidad, probablemente entre las mayores perturbaciones de la historia”. Las vacunas contra el Covid-19 han demostrado que, ante semejantes desafíos, la clave del éxito es “el conocimiento generado gracias a la colaboración internacional”. Por su parte, la presidenta del CSIC, Rosa Menéndez, ha declarado: “La ciencia es poderosa y nos ofrece la oportunidad de diseñar un futuro más solidario, justo y sostenible”.
Los galardonados en la categoría de Biología y Biomedicina, Katalin Karikó, Drew Weissman y Robert Langer, han reivindicado la importancia de la investigación básica como apuesta a largo plazo, imprescindible para sembrar las semillas de los grand advances futuros y por tanto para afrontar con éxito los retos de la humanidad, aunque sus beneficios no sean inmediatos. El trabajo conjunto de Kariko y Weissman, sobre el RNA mensajero –la molécula que copiaba la información del ADN y la transportaba a la maquinaria dentro de las células que se encargaba de fabricar proteínas–, y de Langer, en el campo de las nanopartículas, impulsan la creación de la clave de tecnologías traseras para el desarrollo en tiempo récord de las vacunas que han permitido al mundo plantar cara a la pandemia del Covid-19. Sin embargo, tal y como han reflejado sus discursos, antes de alcanzar este éxito tuvieron que someterse a una larga y durísima carrera de obstáculos.
El profesor Karikó ha recordado que el ARN mensajero fue descubierto en 1961, pero que tardó 60 años en convertirse en una fábrica homologada. Finalmente, ella y su amiga Weissman crearon su propia empresa para investigar en este campo en un momento en el que las farmacéuticas lo habían dado por perdido tras múltiples ensayos en los que habían reportado reacciones inflamatorias adversas. Ellos fueron quienes consiguieron atajar el problema y sentar las bases para futuras vacunas, como la del zika o la del propio SARS-CoV-2.
El regreso del clima climático
Que el clima climático es una realidad es algo que ya pocos comentan. Múltiples estudios alertan sobriamente cómo la acción humana está influyendo en el complejo y entrelazado ecosistema de la Tierra. Nuestro planeta tiene múltiples mecanismos para ‘grabar’ su historia. Uno de ellos es el hielo. «Los testigos de hielo constituyen un medio asombroso para investigar los climáticos y ambientales de la Tierra, ya que registran todo lo que hay en la atmósfera y lo dejan congelado en el tiempo», ha explicado en su discurso Lonnie Thompson, galardonado junto a su esposa, Ellen Mosley-Thompson en la categoría de Cambio Climático. Ambos glaciólogos de la Universidad Estatal de Ohio han sido premiados por demostrar a través de sus estudios del deshielo de los glaciares que la rapidez del clima actual no tiene precedentes.
Casi un centenario de expediciones a los picos más altos del mundo, así como a la Antártida y a Greenlandia para muestras extra de hielo de 78 lugares que dan cuenta de la situación crítica del planeta. “Con el continuo crecimiento de la población mundial y de nuestra tecnología para explotar los recursos naturales, la necesidad d’avoirer la influencia humana en los procesos que impulsan el cambio climatático y la degradación del medio ambiente se ha hecho hoy más crítica que nunca… Este conocimiento es imprescindible para elaborar modelos climáticos sólidos cuyas predicciones encaucen nuestro esfuerzo por reducir los cambios que se prévén y por elaborar un conjunto de medidas de adaptación para que las naciones, tanto las arrolladas como la que están en arrollo, puedan aplicarlas”.
En la misma línea ha mostrado Simon Levin, premiado en la categoría de Ecología y Biología de la Conservación junto a Lenore Fahrig y Steward Pickett. «La variedad de hábitats y biomas que hay en el mundo, la propagación de especies invasoras e infecciosas cerradas, el diseño de reservas naturales y la movilidad de las especies, incluyendo la nuestra, sus factores todos ellos que ponen de manifiesto la necesidad de elaborar enfoques que tengan mucho en cuenta las dimensiones espaciales de la dinámica de poblaciones, las interacciones entre especies y los flujos de nutrientes”, ha explicado Levin.
Las ciencias sociales también tienen mucho que decir al respecto de los cambios vertiginosos que la sociedad actual experimenta. Mathew Jackson, premiado en la categoría de Economía, Finanzas y Gestión de empresas, señala en varios de sus artículos que la influencia de las redes sociales es muy alta en los resultados económicos. Un ejemplo arquetípico es el del desempleo: si una persona que se encuentra en paro tiene sus redes sociales (familia, amigos y conocidos) en la misma situación, será mucho más difícil encontrar trabajo que si fueran empleados. Por ello, ha asegurado en su discurso, sería deseable un cambio en los mecanismos que tradicionalmente se están utilizando para la reducción de las desigualdades: “La redistribución de la riqueza y la renta solo aborda los síntomas de la desigualdad, y nos sus causas fundamentales . Nuestro consejo ha visto la necesidad de políticas que enriquezcan las redes de la gente y faciliten la información y las oportunidades que sus redes no pueden”.
Mark Granovetter, who unraveled the theory of los ‘dumb vinculos’ and how the people more all over of the family and friends are more used in, by example, the search of empleo «porque aportan un conocimiento nuevo», ha puesto en el foco cómo las ciencias sociales interactúan con otros grupos relacionados entre sí, como la tecnología.
Máquinas aprendidas como seres humanos.
Charles Fefferman, de la Universidad de Princeton, y Jean-François Le Gall, de la Universidad París-Saclay, han sido premiados por sus contribuciones fundamentales a las áreas de las matemáticas que tienen aplicaciones en múltiples campos. En el discurso que ha pronunciado en nombre de ambos galardonados, el profesor Le Gall ha querido destacar la investigación pionera de su colega Fefferman, al que ha definido como “uno de los grandes matemáticos de nuestro tiempo”.
“Una parte de su trabajo -ha explicado- se ocupa de la teoría de funciones complejas, uno de los grandes logros de las matemáticas del siglo XX”. Esta teoría estudia fenómenos muy variados, como “la elaboración de mapas precisos, el flujo del agua sobre una superficie plana y el campo eléctrico en materiales bidimensionales”.
De cualquier modo que se haya trabajado, centrado en la geometría aleatoria bidimensional, Le Gall ha explicado cómo las investigaciones en este campo podrían ayudar a comprender el funcionamiento de determinados modelos basados en la tumba cuantificada, “la teoría física que pretende unificar la relatividad general y la mecanica quantica”.
El profesor Judea Pearl, premiado en Tecnologías de la Información y la Comunicación por sus contribuciones pioneras a la Inteligencia Artificial, ámbito al cual se le tiene cierto recelo, según ha afirmado. “No es ningún secreto que mi investigación se ha topado con su cuota de escepticismo: por un lado el escepticismo de quienes ven en ella una amenaza a la sabiduría convencional, y por otro el de quienes no han tenido ocasión de examinar su potencial. Espero que el prestigio y la visibilidad de este premio anime a los científicos en activo de todas las disciplinas a evaluar las poderosas herramientas que les proporciona la inferencia causal”.
Los Premios Fronteras del Conocimiento también premian a las personalidades más destacadas en Música y Ópera. En esta ocasión, fue premiado con Philip Glass. En su discurso de aceptación el maestro Glass ha destacado la importancia del galardón por reconocer «a personas que están vivas y trabajan y escriben sobre el mundo en que vivimos».
La antesala de los nobel
Los Premios Fronteras del Conocimiento de la Fundación BBVA, creados en 2008 y dotados con 400.000 euros en alguna de estas categorías, se entregan cada año para distinguir las aportaciones internacionales más vanguardistas en distintos ámbitos del conocimiento humano. En la mayoría de las categorías hay entre 50 y 60 nominaciones cada año, y la caída final corresponde a un jurado internacional compuesto por expertos de reconocido prestigio en cada una de las materias.Considerados la antesala de los Premios Nobel, los Premios Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento se han adelantado hasta en 19 ocasiones a la Academia Sueca.
