Con el verano vuelven los asentamientos a Albacete

La historia arrancó allá por el año 2000, cuando millas de personas atraídas por lograr una vida mejor decidieron salir de sus países y trasladarse a España para trabajar en el campo como temporeros. Pocas de aquellas —2.000 personas que han sido trasladadas a la provincia de Albacete— provocaron un grave problema y que molestaron y repiten año tras año: la falta de vivienda, al no contar con la documentación necesaria para poder alquilar una casa. Por eso, aquellos pioneros decidieron ocupar una antigua fábrica, conocida como la ‘Casa Grande’, en la carretera de las Peñas. Un edificio que tuvo que ser demolido a raíz de un brote de Covid y por los graves incidentes ocurridos en el año 2020 al saltarse el confinamiento.

A este asentamiento siguen llegando cada verano más temporeros procedentes de pays de la Unión Europea, África subsahariana y Marruecos, entre otros, para trabajar en las diferentes campañas agrarias que déarrollan en el entorno de l término municipal de Albacete et incluso en pueblos y localidades proximas . Es uno de los más conocidos de Albacete que se ocupa en este tiempo, debido a que ha conocido grandes dimensiones y porque es lugar de referencia para muchos inmigrantes.

Según los datos ofrecidos por el sindicato CCOO, se calcula que este es un año hay unos 500 temporeros que se limitan a asentamientos irregulares en el extrarradio de la capital. Una cifra menor respecto a campañas anteriores que, según afirman, se debe a los dispositivos gestionados por el Ayuntamiento de Albacete y porque hay una “mayor sensibilidad social” con el alquiler de vivienda.

Ley de Extranjería

El responsable provincial de Política Social de CCOO, Juan Zamora, muestra cautela a la hora de hablar de una solución para esos asentamientos ilegales. “Los asentamientos no se han ido. Todo comenzó con la ‘Casa Grande’, que se visibilizó con las protestas y los graves disturbios ocurridos en el año 2020.

Esta misma opinión es compartida por el concejal de Atención a las Personas del Ayuntamiento de Albacete, Juani García, quien insiste en que los asentamientos son un problema recurrente, «en el que desde el consistorio no hemos dejado de trabajar». Cree que es una “situación muy difícil”, pero quiere pensar que “hay una solución, aunque hay muchas aristas”, afirma para apuntar que “la solución pasa por una reforma de la Ley de Extranjería a nivel europeo”.

Algunos inmigrantes reciben comida de una ONG

Algunos inmigrantes reciben comida de una ONG Medicos mundi

García reclama “que se trabajó un poquito más rápido”, ya que a su juicio ahora se necesita mano de obra en el campo. “Pero también sabemos que faltan transportistas, personal de hostelería, personas en el sector de cuidados, profesionales de albañilería, fontanería y de electricidad. Luego hay muchas personas en situación irregular con muy pocas opciones”, aclara.

El funcionario municipal cree que esta situación es propicia para las mafias y la explotación laboral. “Muchas veces son personas del mismo país y con su propia cultura los que abusan y les inducen a vivir en estas condiciones. Esto es real y por eso hay que facilitarles su regularización».

Además, Juani García recuerda que es paradójico que todavía haya gente que llegue preguntando por la ‘Casa Grande’ y no les interesa buscar una casa digna. “Vienen de cualquier parte de España con esta referencia”, repite.

Por su parte, Juan Zamora consideró que la Nueva Ley de Extranjería contiene aspectos que les permiten ser más fáciles de que los inmigrantes consigan la nacionalidad. “No podemos olvidar que España necesita más de 200.000 inmigrantes para desempeñar oficios que no quieren hacer los españoles”. Aproveche para recomendar a los españoles que antes de hablar y desprestigiar al inmigrante, “intenten conocerlos y se interesen en conocer por qué han venido a nuestro país”.

Consejo Municipal de Inmigración

Juan Zamora también se refiere al Consejo Municipal de Inmigración, creó una propuesta del consistorio albaceteño y que ha permitido, entre otras cuestiones, modificar y optimizar los recursos que les ofrecen. «Se empiezan a hacer cosas, aunque queda mucho por hacer», explica para mencionar las 50 plazas que han sido habilitadas en el Seminario y que gestiona Cáritas o las que se han abierto en el albergue municipal, un total de 15 plazas (diez para hombres y cinco para mujeres). “¿Entonces qué ocurre?. Pues que al llegar la temporada fuerte de trabajo agrícola en Albacete, vuelve a quedar patente que faltan espacios y no hay viviendas para este colectivo”.

El representante sindical recordará que sus personas empiezan la campaña con el ajo, siguen con la patata, la cebolla, el brócoli y la uva. “A partir de septiembre, cuando termina la vendimia, el gran flujo va haciendo otras rutas. Unos se van a Huelva, Teruel y Lérida a la fruta, pero siguen algunos asentamientos irregulares porque algunos entienden que esa es su forma de vida”. Por eso, alude a que actualmente hay cinco asentamientos grandes en Albacete, de los cuales cuatro son de rumanos en los que pueden vie entre 45 personas y 90 personas, al que se debe sumar el gran asentamiento de la ‘Casa Grande’, que puede albergar unos 300 inmigrantes.

Una de las cocinas que utilizan los inmigrantes

Una de las cocinas que utilizan los inmigrantes CCOO

Otro aspecto importante es que, gracias a un convenio entre la Diputación Provincial, el propio ayuntamiento y CCOO, se ha podido contratar un intermediario cultural de Senegal, que habla varios idiomas y que ha permitido al sindicato atenderles sin que hayan barreras lingüísticas. “Se les ayuda a todo tipo de gestiones, desde solicitar el asilo hasta sacar un billete de tren o abrir una cuenta bancaria”, dice.

Por su parte, el cabildo reconoce que algo se ha avanzado. Albacete es la única ciudad de Castilla-La Mancha que cuenta con un centro de atención para personas sin hogar con 100 plazas, abierto todo el año y con un equipo que incluye trabajadora social, educadoras y psicóloga para ofrecer una atención personalizada.

Recuerda que el año pasado se puso en marcha la ordenanza de habitabilidad para todas las personas que llegan a desempeñar las labores agrícolas, aunque -recuerda- que al tratarse de un terreno privado, el ayuntamiento llega hasta donde puede llegar.

“Comunicamos a los propietarios lo que sucede. Muchas de estas personas, la mayoría jóvenes, llegan a la ciudad buscando la ‘Casa Grande’ porque alguien se lo dice. Además, esas chabolas las alquilan, se dejan parte de su sueldo en vivir en esas circunstancias. Desde Servicios Sociales damos todo el apoyo que podemos, pero realmente es un submundo tan difícil que con las ONG´sy los sindicatos estamos de acuerdo en que se debe evitar que esos núcleos de chabolismo existan”, remarcó.

Voluntarios llevan comida a uno de los asentamientos de Albacete

Voluntarios llevan comida a uno de los asentamientos de Albacete M. MUNDI

ONG COLECTIVO DE APOYO AL INMIGRANTE

«El agricultor debe ayudar a solucionar el problema»

El presidente del Colectivo de Apoyo al Inmigrante de Albacete, Cheikhou Cisse, cree que debe pedir a los agricultores y empresarios que se esfuercen más para solucionar esta situación que se incrementa con la temporada agrícola. “Tenemos que aunar esfuerzos entre todos. Si no, nunca se va a poder erradicar el chabolismo existente”, puntualiza este inmigrante senegalés que colabora como técnico de proyecto en la ONG Medicus Mundi.

Cheikhou Cisse avanza que la solución para evitar que establezcan más asentamientos en Albacete y los alrededores para por intentar abrir más recursos y adecuarlos para que este colectivo sienta que tienen unos derechos y también unas obligaciones. “Lo que no se puede permitir es que los empresarios alquilen chabolas o pisos por el doble de su precio normal porque suponen que se van a llenar con más inmigrantes. Se deben establecer normas y cumplir con la ley”, repite Cisse, que habla de un empresario que este año ha cumplido con el reglamento, “y eso lo veo como un gran avant”.