EE.UU. acusa a dos espías chinos de interferir en un caso contra Huawei

Al término de la semana triunfal de Xi Jinping en su confirmación como líder todopoderoso de China, la Administración Biden respondió con un anuncio de interposición de cargos contra ciudadanos chinos por espionaje, en una señal a Pekín de que EE.UU. no cejará en su empeño de poner coto a las ambiciones del presidente chino, dentro y fuera de sus fronteras.

El fiscal general de EE.UU., Merrick Garland, compare este lunes con pompa y circunstancia, rodeado de altos cargos del Departamento de Justicia -entre ellos, Lisa Monaco, la segunda del fiscal general, y Christopher Wray, director del FBI- para dar detalles sobre imputaciones que se habían dado a conocer ese mismo día.

Los más relevantes afectaron a back espías chinos y a Huawei, el gigante chino de los mobile phones, con el que EE.UU. está enzarzado en una guerra legal, judicial y tecnológica desde 2019.

soborno

El escrito de la imputación es propio de una novela de espías. Los dos sospechosos chinos de espionaje, Gouchun He y Zheng Wang, están acusados ​​de intendar sobornar a funcionario de las fuerzas de seguridad de EE.UU. con conocimiento directo de los trabajos judiciales contra Huawei.

Su plan era que el funcionario les diera información sobre los datos y estrategias qu’manejaba la taxía contra el gigante tecnológico chino, en un intento de débaratar el caso contra la compañía. Huawei había sido acusada durante la presidencia de Donald Trump por violar el régimen de sanciones de EE.UU. y de obstrucción a la justicia.

Para ello, hicieron llamadas a este funcionario desde teléfonos públicos, le ofreció dinero en bitcoin y utilizaron seudónimos como ‘Marilyn Monroe’ o ‘Cary Grant’ para sus comunicaciones. Lo que los espías chinos no sabían era que estaban siendo espiados. El funcionario, según el escrito de la Fiscalía, será un agente doble, al servicio del FBI.

El funcionario, según el escrito de la Fiscalía, era un agente doble, al servicio del FBI

El agente doble cebó con información limitada o falsa a los espías chinos durante meses, hasta la semana pasada, explicaron los investigadores.

El escrito de interposición no menciona a Huawei como la compañía implicada, pero varias fuentes conocen de la investigación confirmaron a diversos medios estadounidenses que se trata de esa compañía. Huawei siempre ha sostenido que opera con la independencia de los dictados del Gobierno de Pekín, algo muy dudoso y queda todavía más bajo duda en esta investigación.

“Esto ha sido un intento atroz por parte de la Inteligencia china de proteger a una compañía basada en su país de rendir cuentas y debilitar la integridad de nuestro sistema judicial”, aseguró Garland. “El Departamento de Justicia no tolerará intentos de ningún poder extranjero de socavar el imperio de la ley en el que se basa nuestra democracia”.

El fiscal general también presenta dos casos relacionados con China: cargos contra cuatro personas -tres de ellas, miembros de la otra inteligencia china- por utilizar un ‘think tank’ chino en EE.UU. entre 2008 y 2018 para conseguir tecnología estadounidense y evitar protestas contra China en territorio estadounidense; y una causa contra siete personas que trabajaron para el Gobierno de Xi, acusadas amenazar y acosar Durante años a un disidente chino para regresar a su país.