Rick Hoyt ​អ្នក​រត់​ពិការ​ខួរក្បាល​ដែល​ត្រូវ​បាន​ឪពុក​គាត់​ប្រែ​ទៅ​ជា​ "បុរស​ដែក​" ​បាន​ស្លាប់​en

Apenas ha podido sobrevivir a su padre dos años. Sin él, ni la vida ni el atletismo eran lo mismo.

Rick Hoyt, atleta tetrapléjico y con parálisis cerebral, fallecía este lunes a los 61 años debido a complicaciones en su sistema respiratorio. En marzo de 2021 falleció en Padre Dick, participando con él en más de 1.000 carreras, entre ellas varios eventos ‘Ironman’ y más de una edición de la Maratón de Boston. Juntos conformaban el ‘Team Hoyt’, emblema de las carreras populares en Estados Unidos. Una pareja que supo ganarse el respeto y el reconocimiento de su deporte por su constancia y pundonor.

“Como muchos saben, Rick y su padre, Dick, fueron iconos de las carreras en ruta y los triatlones Durante cuarenta años, e inspire a million people con discapacidad a creer en ellos mismos”, explicó el comunicado de la Fundación Hoyt.

Rick nació en 1962 con tetraplejía y parálisis cerebral porque el cordón umbilical se quedó enganchado en el cuello y cortó el flujo de oxígeno al cerebro. No había esperanzas para él, pero junto a su mujer Judy, también fallecida, Dick se empeñó en dar a su hijo una educación lo más normalizada posible. Este militar retirado trabajó con él y lo educó en casa hasta que fue admitido en la escuela pública en 1975, a los 13 años. Con los años también modificó una plaza en la Universidad de Boston y se graduó en Educación Especial. “Rick también fue un pionero en educación. Su madre cambió las leyes que permitieron a su hijo ser educado junto a personas sin discapacidad”.

Cuando era adolescente, a través de la computadora interactiva a través del canal de comunicación, Rick le pidió que supiera cómo participar en una carrera beneficiada con 5 mil. Dick completó aquella primera carrera empujando la silla de ruedas de su hijo, quien al acabar le dijo una frase que cambiaría la vida de ambos: “Papá, cuando estoy corriendo, siento que no soy un discapacitado”.

Desde ese día participó en toda clase de competiciones atléticas, incluyendo duatlones y triatlones. Hicieron del maratón de Boston su competición fetiche, y de hecho su edición de 2009 se convirtió en su carrera conjunta número 1.000.

Fueron, también, la primera pareja en terminar un Ironman, la prueba más dura del mundo: (53.86 kilómetros nadando, 42.1 corriendo y 180 en bicicleta). En el agua, Dick arrastraba con una cuerda un pequeño bote en el que iba metido a su hijo.

Justo este sábado debía disputar la carrera popular ‘Yes you can’, organizada por la Fundación Hoyt en Hopkinton, Massachussets. La familia aún tiene que dir dir si pospone la prueba o el mantenimiento en honor a Rick y Dick.