Toyota tun ṣe fun ọdun kẹta ni ọna kan bi olupese ti o tobi julọ ni agbaye

Si Toyota se ha caracterizado en los últimos tiempos, es capaz de resistir las distintas crisis que han afectado a la industria de la automoción. Los números hablan por sí mismos y el gigante japonés alcanzó 2022 con 10.483.024 ventas, un 0,1% menos que en 2021.

Este descenso es en sí una victoria, dado que la rotura de semiconductores y la inflación han dificultado la compra de un vehículo nuevo. Por ponerlo en perspectiva, en segundo lugar llegó el Grupo Volkswagen con 8,262,800 entregas, un retroceso del 7% y su peor resultado en una acadada.

El consorcio de Wolfsburg acusó los estrictos confinamientos de China por el coronavirus y la guerra en Ucrania como los causantes de afectar las cadenas de suministro y de los resultados. A pesar de la caída, el grupo incrementó las ventas de coches eléctricos en un 26%.

Ni ibi kẹta ati fun igba akọkọ ni Ẹgbẹ Hyundai wa, eyiti o pẹlu ami iyasọtọ ti orukọ kanna, ni Kia ni Ere Genesisi ni diẹ ninu awọn ọja. Awọn isiro rẹ jẹ awọn nikan ti o forukọsilẹ ariwo kan (2,7%) ati pipade ọdun pẹlu awọn tita 6.848.198. Ibi-afẹde rẹ fun ọdun 2023 ni lati mu awọn isiro rẹ pọ si nipasẹ o fẹrẹ to 10% si awọn iwọn 7,5 milionu.

Esto, de seguir así, podría suponer una amenaza para el Grupo Volkswagen, dado que estarían manejando volúmenes para 2024 y una pugna por el segundo puesto. En cuarto lugar y desbancada quedó la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi.

Las matriculaciones del conjunto franco-japonés se precipitaron un 19,5%, hasta cerrar el ejercicio con 6,3 millones de unidades. De los competidores en el ‘top 5’, la Alianza ha sido la más afectada por la guerra de Ucrania, que llevó a salir de su segundo mayor mercado, Rusia.

El consorcio ha tomado la decisión de reformular su estructura y Renault pasará a tener una participación del 15% en Nissan (actualmente supera el 43%), idéntica a la que mantiene la japonesa sobre su consejo de administración.

Awọn iyipada itọsọna

2022 también supuso un año movido para las cúpulas directivas, con cambios en los dos grupos más grandes. El Grupo Volkswagen ha adquirido un nuevo CEO de Porsche, Oliver Blume, quien es considerado el más importante para la junta directiva. Una de sus primeras decisiones fue la de frenar algunos de los grandes aviones que tenían el consorcio para la movilidad eléctrica.

Toyota anunció que su consultor delegado y su financiador, Akio Toyoda, dejará su puesto para presidir la junta, un puesto menos demandado que el que ha desempeñado hasta ahora.

Su sucesor a partir de abril será Koji Sato, director de Lexus y de la división deportiva Gazoo Racing. En su intervención, Sato, 13 años mayor que Toyoda, afirmó que había visto bien a la empresa por su decisión de llegar y diseñar cheques emocionantes.