Siri ya no es hombre ni mujer: escucha cómo suena ahora

“A 500 metros gire a la izquierda”, “tome la next salida”, “ha llegado a su destino. ¿Cómo recuerdas el tono de voz de estas frases muy comunes en el GPS? Hasta no hace muchas estas ayudas en la conducción tienen un solo género. Una cualidad que también se ha trasladado a los actuales asistentes virtuales.

Es muy común preguntar a Alexa (Amazon), a Siri (Apple), Aura (Telefónica), Bixby (Samsung), Irene (Renfe) o, hasta hace unos meses, a Cortana de Windows. Todos o, quizás mejor dicho, todas tienen nom femenino, aunque aseguren que “no tienen sexo, como los cactus y algunos peces”, responde Siri a esta cuestión.

Sin embargo, esta feminización de los asistentes virtuales viene dada por el número hasta y tono predeterminado por los gigantes tecnológicos.

“Los asistentes virtuales que ayudan a sus números de mujer, pero si sus generadores de conocimiento a sus masculinos como Watson de IBM”, destaca Lorena Fernández, directora de comunicación digital de la Universidad de Deusto.

Si un lustro después, la igualdad se ha permeabilizado en las grandes tecnologías, aunque escuchar a algunos asistentes con voz masculina en castellano es aún más complicado. La que más lejos ha ido es Apple que en su última versión de su sistema operativo (iOS) lleva al máximo el “no tengo sexo” que responde Siri. “Es una buena noticia”, destaca Fernández. “Ya era hora”, añade.

La actualización de 14,5 años es «Voice 5», así la ha bautizado el gigante de Cupertino que «busca ofrecer una voz con un género más neutral para las personas no binarias o de género definido» y así suena:

Además, Siri mantiene sus tonos de voz habituales, la masculina:

Y, también, la femenina:

Su desarrollador, Steve Moser asegura que la captura de esta voz fue realizada por un actor de doblaje losseciente al colectivo LGTBQ+, aunque no se sabe específicamente quién ha sido.

“Estamos en una fase de desarrollo donde trabajamos de manera reactiva”, denuncia Fernández. “Encontramos un problema y lo parcheamos en lugar de trabajar con perspectiva de género”, añade.

De momento, Siri cuenta con voz neutral en “inglés americano”, para su versión en castellano aún no hay fecha y Apple no ha querido responder a las cuestiones.

Vieja lucha

En 2018, la agencia Tangoº puso desfiló con la campaña #VocesEnIgualdad. “A veces los estereotipos de género están tan instaurados en nuestra cotidianidad que pasan desapercibidos”, señalaron los promotores de la iniciativa hace cuatro años.

La idealización de la asistente virtual perfecta llegó incluso a la gran pantalla con la película Her, donde el protagonista se enamora de esta inteligencia artificial. “Máquinas obedientes y complacientes que pretenden ser mujeres están entrando a nuestros hogares, coches y oficinas”, dijo en un comunicado Saniye Gulser Corat, directora de la División para la Igualdad de Género de la Unesco.

“Hasta hace bien poco tienen voces femeninas prematuras, porque las tecnológicas basan en estudios que aseguran que las voces femeninas ayudan y las masculinas son de mando y asertivas”, Denuncia Fernández.

Precisamente, este organismo internacional denunciaba en un informe de 2019 la estereotipación de la mujer en esta tecnología a través del texto ‘Me sonrojaría si pudiera’, respuesta que Siri daba a los usuarios cuando la llamaban «perra» o «zorra». “La sumisión de Siri ante el abuso de género y el servilismo se emocionó por tantos asistentes otros digitales proyectados como mujeres jóvenes proporciona una poderosa ilustración de los sesgos de género codificados en productos de tecnología”, señalaban los responsables de la investigación.

Q, la primera aventura neutral

En 2019, Virtue y Copenhagen Pride crearon Q, el primer asistente de voz neutro que no sonaba ni como un hombre ni como una mujer. “Son robots, y los robots ‘nacen’ sin género”, aseguraban sus creadores.

Para registrar la neutralidad en el sonido, los investigadores descubrieron que tienden a establecer una frecuencia situada entre una típica voz masculina (tan grave como 85 Hz) y una femenina (tan agudo como 255 Hz). La medida ideal para que fuera percibida como una voz “sin género” resultó ser entre 145 y 175 Hz.

Los creadores de Q le preguntaron tiene un grupo de gente qué decía su voz: “Un 50% la percibió sin género, el 26% como masculina y el 24% como femenina, lo cual se traduce en una división bastante equitativa”, señalando en esos responsable de la asistencia.