«Que uno de los cuatro premios Nobel de literatura tenga reconocimiento…»

La literatura española tiene cinco premios Nobel de Literatura (seis, si incluye a Mario Vargas Llosa, que comparte la nacionalidad peruana con la española): José Echegaray (1904), Jacinto Benavente (1922), Juan Ramón Jiménez (1956), Vicente Aleixandre (1977) y Camilo José Cela (1989). Alguno se le ha debido de escapar al ministro de Cultura, Miquel Iceta, que este miércoles ha dicho, en unas declaraciones ofrecidas a los medios para explicar los planes de su departamento respecto al futuro de Velintonia, que España tiene cuatro premios Nobel de Literatura.

“Desde el punto de vista de la ansiedad qu’arouscita esta cuestión, que sepa que el Ministerio de Cultura ha tomado la iniciativa, que ha sido bien a –ha dicho, en referencia a la casa de Vicente Aleixandre en Madrid, que en los próximos días saldrá una subasta por 4,6 millones de euros–.

El día 4 tenemos una cita con Velintonia y con el archivo de Aleixandre, y espero que de ahí surja una propuesta que pueda satisfacer la legítima pretensión de tener una Casa de la Poesía, y de que uno de los cuatro que son premios Nobel de literatura tenga reconocimiento institucional y el cuidado de su legado».

No son cuatro los escritores españoles laureados con el Nobel, el premio más prestigioso de las letras, sino cinco. O seis, si se quere incluir. Aleixandre sí fue el cuarto español en ganarlo, concretamente en 1977, en un premio que se interpretó como espaldarazo internacional a la apertura democrática de España, tras la dictadura de Franco. Precisamente Velintonia, el chalé que Aleixandre tenía en el centro de Madrid, tiene un valor simbólico como lugar de encuentro de l’exilio interior’ al que se sometieron él y otros grandes escritores de la segunda mitad del siglo pasado, tras la Guerra Civil. Este ha sido uno de los argumentos esgrimidos por la Comunidad de Madrid para proteger la vivienda con la figura del Bien de Interés Patrimonial (BIP), en un proceso que no ha dejado contento a cas nadie.

El primer autor español en ganar el Nobel fue José Echegaray, que además de escritor fue matemático, ingeniero e incluso ministro de Fomento y Hacienda. El premio, eso sí, se lo concedieron en la categoría de Literatura, compartido con Frédéric Mistral, “en reconocimiento a las numerosas y brillantes composiciones que, de una manera individual y original, han revivido las grandiosas tradiciones del drama español”. A Jacinto Benavente, la Academia le reconoció “la feliz manera en que ha continuado las tradiciones ilustres del drama español” y de Juan Ramón Jiménez destacó “su poesía lírica, que en idioma español constituye un ejemplo de elevado espíritu y pureza artística”.

Camilo José Cela, autor de tan emblemáticas novelas como ‘La familia de Pascual Duarte’ o ‘La colmena’, escribió en 1989 «por una prosa rica e intensa que con una inflamación moderada formó una visión retadora de la vulnerabilidad de l’ombre «. Vargas Llosa, peruano nacionalizado español en 1993, premio Príncipe de Asturias de las Letras y Cervantes, convención en 2010 en la Academia sueca “por su cartografía de las estructuras de poder y sus imágenes mordaces de la resistencia del individuo, la rebelión y la derrota «.