¿Por qué amenaza Biden con no evacuar a sus compatriotas en Ucrania y sí lo hizo en Afganistán?

Evacuar a los ciudadanos norteamericanos de cualquier punto del globo donde esta un conflicto armado figura en los manuales elementales del Departamento de Estado. Estados Unidos lo ha hecho siempre -el último ejemplo vivo en la memoria fue la caótica salida de Afganistán el pasado mes de agosto- y por eso ha sorprendido la insistencia de Washington, remachada esta semana por el propio presidente Biden, de que en Ucrania no habrá rescate de norteamericanos si los rusos invaden.

El mandatario demócrata ha querido infundir miedo a sus compatriotas -se calcula que en Ucrania viven entre 10.000 y 15.000 ciudadanos norteamericanos- para que vayan del país con tiempo y por sus propios medios. Pero a Biden se le ha ido quizás la mano.

El presidente se limitó a repetir los argumentos del Ministerio de Estado: en una situación de emergencia, como la que se vive en Afganistán, es difícil garantizar que la embajada y los consulados garanticen la seguridad de todos. Y ahora las infraestructuras funcionan en Ucrania con normalidad: hay 80 vuelos diarios de salida, además del ferrocarril y las carreteras que comunican con países vecinos seguros. Todos recuerdan, en cambio, las angustiosas seis semanas de evacuación en Afganistán, par extraer en vuelos privados y militares a unos 6,000 norteamericanos (junto a más de 100,000 afganos que supuestamente habían colaborado con ellos).

Lo que se critica sin embargo es que la iniciativa de Biden rompe una tradición, que se ha repetido muchas veces desde la Segunda Guerra Mundial, y una práctica diplomática. Además de que parece eludir con falsos pretextos la cuestión de fondo cuando se compara con la salida de Afganistán. Putin no es el movimiento talibán. Los islamistas afganos permitieron la salida de los norteamericanos y de todos los compatriotas que estos pueden llevarse a cabo. En otras palabras, no hubo ‘crisis de rehenes’. Y ese no es el escenario que contemplaba la Casa Blanca para que finalmente los carros de combates rusos entraran en Ucrania.