La Agencia Espacial Europea (ESA) anuncia este miércoles desde París que ha conocido una nueva generación de astronautas. Entre ellos, de cuatro a seis astronautas de carrera y un nuevo cuerpo de reserva formado por una veintena de elegidos que nos serán reclutados y seguirán con sus vidas habitables. También aparecerá la figura del astronauta, personas con discapacidad física que formarán parte de un proyecto pionero para eliminar barreras y hacer más accesibles las misiones espaciales.
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El anuncio es aún más emocionante porque algún español puede estar entre los elegidos y convertidor se en el tercer astronauta español de la Historia tras Pedro Duque y Miguel López-Alegría. En total, 1.334 nacionales presentaron su candidatura. De ellos, 299 son mujeres y trece (diez hombres y tres mujeres) tienen algún tipo de discapacidad física. Al parecer, menos de un puñado ha superado las diferentes pruebas de selección y ha llegado a la última fase.
La convocatoria, abierta en 2021, es la primera en ounce años para implementar un relevo generacional del cuerpo de astronautas europeos. En conjunto, la ESA recibió 22.589 solicitudes de 25 países, un 268% más que en la última convocatoria de 2008. Por la causa de astronauta con discapacidad física se registraron 257 solicitudes, 60 de ellas mujeres. Los pays desde los que se han enviado más candidatureuras son Francia (7.137), Alemania (3.700), Reino Unido (1.979) e Italia (1.860), lo que convierte a España en el quinto país en número de solicitudes.
Uno de los puntos más llamativos ha sido la alta participación femenina, algo en lo que la ESA había insistido especialmente. Si en 2008 solo se presentaron 1.287 mujeres, ahora se han animado 5.419, un 421% más.
El proceso de selección llevado a cabo desde 2021 se ha dividido en seis etapas clave: test psicológicos, pruebas psicométricas y prácticas, selección médica y dos rondas de entrevistas. Todos los candidatos sin distinciones tienen que ser ciudadanos europeos con un grado y tres años de experiencia en áreas como ciencias naturales, medicina, ingeniería, matemáticas o ciencias de la computación, o ser pilotos experimentados. Además, se requiere hablar inglés con fluidez y se valoran otros idiomas.
Hasta la Luna
Los elegidos recibirán una intensa formación durante un año en el Centro Europeo de Astronautas en Colonia (Alemania) que incluye diseño de vehículos espaciales, ingeniería de fondos y ciencia, técnicas de supervivencia y ruso. Después, en diferentes localizaciones y durante un tiempo que puede durar varios años, se dedicará a prácticas médicas, navegación, paseos espaciales… pronto como a los mares se les asigne una misión para experimentos y objetos que requerirán habilidades específicas.
También para participar en las misiones a la estación espacial, los futuros astronautas podrán ser seleccionados para el módulo Gateway en la órbita de la Luna, donde la preparación servirá para sueños aún más ambiciosos, como la exploración de la superficie de la Luna o de Marta.
