medio siglo de cantares para que vibre el alma gallega

Hablar de Fuxan os Ventos es hablar de música, sí, pero también de poesía, combate, tradición y cultura. Es aludir a un relicario que nutren los versos de cantautores y escribanos sobrios su tierra y sobre la sociedad en la que les tocó vivir, a los sentimientos que despiertan; pero también es una descripción a medio siglo de maduración y aprendizaje; el tiempo que han estado sobre los escenarios de todo el continente.

Este trayecto lo recrea la muestra ‘Fuxan os Ventos. 50 anos de historia’, de entrada gratuita, que convierte la sede de Afundación, en la compostelana rúa do Vilar, en una excursión por la memoria. Desde 1972 en el que un grupo de jóvenes, animados por un párroco lucense, se someterán a primera vez a los escenarios para interpretar un tema inédito con un número que acabaría calando mucho en su identidad, hasta sus trabajos más recientes. Su historia la cuenta el recopilatorio documental que construyen letras de canciones, cartas, imágenes, recortes de periódicos, múltiples piezas de arte conceptual, e incluso, algunos de los propios instrumentos empleados por los integrantes en sus actuaciones. De hecho, el repositorio también ofrece la posibilidad de escuchar varios temas siendo interpretados en sus distintas etapas; algunos, inéditos. Además de una sorpresa cerca del final del recorrido que hará las delicias de los visitantes más melómanos.

Para la visita de ABC a este espacio Tereixa Novo se ofrece como guía de viaje. Y no podría haber una mejor compañía. Docente de profesión, pero para muchos más conocidos por integrar las voces altas de Fuxan desde el día uno del conjunto. Por los poros se respira música, poesía y un eterno espíritu pendenciero.

De Folk 72 a Fuxan os Ventos

Tereixa recuerda nítidamente los inicios de la formación, a los cuales está dedicado la primera de las tres plantas del muestrario. Cuenta cómo bajo el ala del cura Mato, el sacerdote al cargo de las misas en las que cantaba su coro, comenzó a gestarse una agrupación folk que ensayaba “desde [canciones] tradicionales gallegas, como la Rianxeira, hasta del Foro Universal, o el Cumbayá”; en definitiva, un “caldo de cultivo” al que se le escapa Mato en un impulso. In 1972 triunfan en el festival San Lucas de Mondoñedo bajo el ‘comodín’ de Folk 72, pero a la vuelta adoptan Fuxan os Ventos, título de la «compleja» canción compuesta por Mato con la que ganaron el concurso, como número oficial: » Desde ahí empieza la historia real».

Varios de los integrantes de Fuxan os Ventos, retratados en plastilina, en un showcase de la exposición

Varios de los integrantes de Fuxan os Ventos, retratados en plastilina, en un showcase de la exposición PB

En orden cronológico, el primer piso recoge testimonios de la formación abriéndose paso en sus primeros años. Hay imágenes y registros de la primera vez que sale de Galicia, para dar un concierto en la Sala Cerebro de Madrid; videos de acción en vivo; sus agendas y listas de canciones, y el primer puesto de escucha con auriculares: “Dos de las que se mandaron a Phillips”, cuenta Tereixa, sello con el que grabarían su primer disco, homónimo.

A paseo en el que perderse

Avanzando, encontramos portadas de discos. Suyos, por nombrar los siguientes, bajo dicha marca, ‘Tequeletequele’, ‘Galicia Canta O Neno’ y el trascendental ‘Sementeira’, cargados de piezas de significancia popular y social. Y de otros contemporáneos de la música y la poesía con raíces gallegas con quienes unieron fuerzas, como Suso Vaamonde. En aquellos años “intentamos establecer relaciones musicales con Galicia, Euskadi, Cataluña”, comentó Tereixa: “Actuamos allí muchas veces y otras se montaban actos aquí”. Sería ese ánimo de hermanamiento el que los actuarían frente a comunidades de toda Europa, cosechando siempre el entusiasmo de su público, quien desde las primeras canciones sintió una fuerte vinculación con las circunstancias que dibujaron sus letras. Ya lo dice Tereixa: “Al final, también son las suyas”.

Tereixa Novo, en la muestra, rodeada por algunos de los instrumentos con los que se interpretaron temas de Fuxan

Tereixa Novo, en la muestra, rodeada por algunos de los instrumentos con los que se interpretaron temas de Fuxan PB

Al cabo de un paseo por las décadas posteriores y hasta la actualidad, corona la muestra un mural con fotografías de ‘las caras’ de Fuxan, los distintos miembros que han tenido; cada una, acompañada de senta carta manuscrito expresando sus sentimientos por la formación. Además, a modo de regalo, pueden oírse dos canciones de un disco que nunca llegaron a ver la luz –junto a ‘Eu en ti’, liberada este mes– y vers de cerca cuatro de sus instrumentos más característicos: guitarra, gaita, acordeón y zanfona. Pero la guinda de las curiosidades la ofrece el segundo piso. A través de cuatro altavoces dispuestos en semicírculo, suenan las voces de la agrupación entonando una misma canción ‘a cappella’. Se crea, así, el efecto de escucharlas individualmente, en todos sus matices, al acercar el oído a cada uno; o el de sumergirse en el coro que se crea posicionándose en el centro. Una suerte de ‘concierto particular’, en el que está garantizado perderse, y el mejor ejemplo de lo que, en esencia, es capaz de transmitir Fuxan os Ventos.