El regimiento de Nicolás Maduro tenía como embajador en Teherán a un comandante, José Rafael Silva Aponte, quien participó como golpista en 1992 junto a uno de los tripulantes del avión venezolano-iraní Emtrasur, retenido en Buenos Aires desde el pasado 6 de junio.
El ahora diplomático Silva Aponte fue designado comandante de la Fuerza Aérea bolivariana en 2020. Hizo carrera militar desde que en noviembre de 1992 participó en el segundo intento de golpe contra Carlos Andrés Pérez, líder del fallecido Hugo Chávez Frías, que irrumpió el 4 de febrero de ese mismo año en el primer golpe contra la democracia.
El nuevo embajador en Irán también fue edecán de Chávez. Los oficiales que se involucraron en las dos asonadas militares de 1992 se han enriquecido en estos 23 años de chavismo. Han ocupado altos cargos en la dirección de la administración pública, economía, servicios, finanzas, telecomunicaciones y transportes, además de actividades ilícitas como contrabando, narcotráfico y corrupción.
Los vínculos de Silva Aponte con la tripulación del avión incautado en Ezeiza viene de su pasado común con los golpistas oficiales. Entre 2017 y 2018 como comandante de la base aérea El Libertador en Palo Negro, Aragua, cerca de Caracas, asistió a la sede de Emtrasur, fundada en 2020 y filial de carga de la fuerza aérea venezolana Conviasa.
La aeronave de Emtrasur, Boeing 747-300 con matrícula YV3531, aterrizó en el Aeropuerto Internacional Bonaerense de Ezeiza, contaba con una tripulación inusual de 19 personas (5 iraníes y 14 venezolanos).
En la lista de los 14 tripulantes venezolanos destaca el nombre de Cornelio Trujillo Candor, de 66 años, quien fue señalado por medios venezolanos como uno de los pilotos que el 27 de noviembre de 1992 participó en un intento de golpe de Estado para liberar a Hugo Chávez , que estaba en prisión. De ahí el vínculo con su compañero de armas, el nuevo embajador Silva Aponte.
El piloto Trujillo es egresado de la Academia Militar Venezolana y a lo largo de su carrera logró algunos hitos como el ascenso al cargo del Teniente Coronel de la Aviación. También está entre los fundadores de Conviasa, la línea aérea de bandera venezolana en la que trabajan otros de sus compañeros de tripulación con los que desde hace algunos días permanecen en el Hotel Plaza Canning.
Además, de acuerdo al portal monitoreamos.com, el 8 de noviembre de 2006 fue nombrado gerente general de Seguridad Aeronáutica del Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (INAC).
“No es un personaje popularmente conocido en Venezuela, no es súper conocido. Si lo es para algunos militares expertos o periodistas mayores que han cubierto el golpe”, contó a PERFIL un periodista de Venezuela que prefirió resguardar su identidad.
Las aerolíneas venezolanas Emtrasur y Conviasa, así como la iraní Mahan Air, que anteriormente propietaria de la aeronave de carga involucrada en el caso, están sancionadas por la OFAC (Oficina Federal de Activos) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos por su presunta participación en operaciones terroristas en todo el mundo mediante apoyo logístico.
