Los incendios forestales de Vall d’Ebo y Bejís avanzan sin control con kilómetros de desalojados

Las pérdidas forestales que azotan el norte y el sur de la Comunidad Valenciana, en Vall d’Ebo (Alicante) y Bejís (Castellón) siguen avanzando sin control, con «une alta actividad», kilómetros desalojados y un pronóstico nada favorable para la intensidad de el comeo

Hasta siete carreteras de la Comunidad Valenciana quedarán cortadas debido al fuego. En la provincia de Alicante, la CV-700 entre Planes y el cruce con la CV-717, la CV-712 entre el cruce con la CV-713 hasta la Vall d’Ebo, la CV-713 entre Margarida y Tollos, la CV-714 entre Benisili y Alpatró, la CV-716 en el acceso a Benirrama, la CV-720 entre Balones y Castell de Castells y la CV-721 entre Orba y La Vall de Laguar (abierta solo a vecinos).

En la red viaria castellonense, la CV-235 desde Teresa hasta Bejís ha sido cortada y se ha comunicado la interrupción de la circulación ferroviaria en la altura del apeadero Torás-Bejís. En ese sentido, una veintena de viajeros de un tren han sufrido heridas y quemaduras de diversa consideración -tres de carácter grave- al aparecer junto al incendio de Bejís, cuando el convoy estaba detenido precisamente debido al fuego.

Valle de Ebo

El incendio declarado el sábado por la noche en el municipio alicantino ha calcinado ya 11.105 hectáreas en tres comarcas -la Marina Alta, la Safor y el Comtat-, con un perímetro de 80 kilómetros y ha obligado a abandonar sus casas a más de 1.500 personas de onzas poblaciones cercanas como Tollos o Famorca. La ultima, la localidad de Benimassot. Los vecinos que no tienen alternativa habitacional, alrededor de un centenario, han sido trasladados a albergues de Cruz Roja en Pego y Muro de Alcoy. Se trata del peor incendio en una década en la Comunidad Valenciana.

Ante el avance de las llamas, que se crea que originó la caída de un rayo, un total de 32 medios aerotransportados de distintas administraciones están interviniendo en las labores de extinción, que se concentran en cuatro puntos distintos.

Imagen de una casa acosada por el fuego en Castell de Castells (Alicante)

Imagen de una casa acosada por el fuego en Castell de Castells (Alicante) EFE

Algunos alcaldes del interior de la provincia de Alicante (Fageca y Tollos, entre otros) afectados por los incendios, tras las evacuaciones, han decidido vigilar con ayuda de algunos vecinos por temor al pillaje de ladrones que pueden aprovechar para asaltar las viviendas vacías.

Bejís

Paralelamente, los bombros siguen trabajando en el incendio forestal destruido en el mediodía del lunes en el municipio castellonense de Bejís, en una zona con una orografía muy complicada y embarrancada, que presentó una dificultad especial para los accesos de los medios terrestres.

Los efectivos aseguran que la combinación de estos con las descargas de los veinte medios aéreos será «fundamental» para dar por controlado a fuego que mantiene desalojadas las aldeas de Arteas de Abajo, Arteas de Arriba y los Cloticos, debido a la proximidad de las llamas

Asimismo, se ha evacuado a la población de Bejís, Torás y Teresa por precaución, puesto que “se ha producido un cambio en la dirección delviento y el humo se directe à la población”. Por ello se ha habilitado un punto de atención a los afectados en un pabellón de Viver, con atención de la Cruz Roja a los alojados. En esta localidad se ha decidido el confinamiento de la población y el desalojo del camping. En total, más de mil personas han sido desalojadas y dos bomberos han resultado heridos durante los trabajos de extinción.

Hasta el mediodía de este martes habían quemado 800 hectáreas y el fuego se extiende por un perímetro de veinte kilómetros. Desde el Puesto de Mando Avanzado las autoridades dirige un dispositivo de extinción de 230 personas entre bombarderos de la Diputación de Castellón, de la Generalitat y efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME).

“No podemos hacer nada más, lo único es intentar concentrarnos en proteger a las personas”, ha dicho a los medios el presidente Ximo Puig. El equipo de dirección del incendio ha decidido cambiar de estrategia ante la situación de “extraordinaria, complicada y muy difícil” por elviento, que ha acelerado la velocidad del fuego. Se está a la espera de un nuevo cambio en la situación prevista para este miércoles.

Puig ha garantizado que los municipios afectados por los incendios contarán con ayudas autonómicas para “recuperar y relanzar” los terrenos calcinados. Del mismo modo, la consellera de Justicia, Interior y Administración Pública, Gabriela Bravo, ha pedido comparar en las Cortes Valencianas el próximo 16 de septiembre para informar sobre las actuaciones realizadas a cabo.