López Simón, por la puerta grande Iván Fandiño

Con el pañuelo verde arrancó la corrida: corrió turno El Fandi y salió el previsto para el cuarto lugar. Con buenas maneras manejó el granadino el capó antes del jaleado tercio de banderillas. Con complicaciones este fuenteymbro, brusco y a la defensiva. No lo vio claro en la muleta Fandila, pues nunca embistió claro.

Se vencía el segundo por el derecho y acudía mejor por el izquierdo, por donde Daniel Luque sacó tandas notables, adueñándose desde el principio de la embestida con una técnica perfecta. Tanto que hasta por el derecho metió a Sacacuartos en el canasto. El de Genera sigue viendo toro por todos lados. El espadazo dio paso a la oreja.

Dispuesto y valiente López Simón con el tercero, que se movió sin terminar de humillar. Cortó una oreja tras pinchazo y estocada.

  • Coste de las Cruces. Sábado, 17 de septiembre de 2022. Tercera corrida de la feria. Toros de Fuente Ymbro y José Vázquez (4º y 6º), de mermada casta, deslucidos en conjunto.

  • El Fandi, de azul y azabache. Estocada rinconera (silencio). En el cuarto, empuje (petición y saludos).

  • Daniel Luque, de azul y oro. Estocada (oreja). En el quinto, metisaca en los bajos y el toro se echa (silencio).

  • López Simón, de sangre de toro y oro. Estocada (oreja). En el sexto, estocada contraria (oreja).

Engatillado y con una cara ‘torera’ el cuarto, sobrero de José Vázquez, de muy mermada casta. Tras el visible tercio de banderillas -hasta cuatro pares- El Fandi lo puso todo en muleta, con voluntad de agradar con un toro que echaba las manos por delante y se quedó corto, sin celo. Tras la setocada, le pidieron con fuerza la oreja, pero el palco no hizo caso. «¡Presidente, dimisión!», coreaba el tendido.

Hasta lo que no había sacado Luque al desfondado quinto. Nueva lección de capacidad en la que vio su enorme momento, rematado con un arrimón tremendo Lástima que el acero se fuera a los bajos en el metisaca. Se echó el fuenteymbro y se esfumó la opción de premio.

Remendó la corrida de Gallardo uno de José Vázquez -a la postre terminarían lidiándose dos con este hierro-. No prometía nada el hombre en los primeros tercios, pero los deseos de López Simón le dieron la llave de la puerta grande con otra oreja. Porque ahora el palco no se lo pensó y la que negó a Fandi sí se la dio al de Barajas.