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España tiene un nivel de riesgo en accidentes de tráfico elevado, con factores como la carretera, la carretera humana y la circulación de vehículos como muy de las claves que intervienen en las cifras de siniestralidad.
es una de las conclusiones del estudio «El semáforo de la Movilidad» elaborado por la empresa especializada en seguridad vial Rivekids. Según su CEO, José Lagunar, “Estamos con el semáforo en rojo, en riesgo extremo, con un nivel de riesgo en accidents de tráfico muy alto y no vemos hasta la fecha ningún indicador que nos diga que esta situación vaya a revertir”.
En la información, elaborada a partir de los datos registrados por entidades como la DGT, el Ministerio de Transportes, la Asociación Española de la Carretera y la Asociación Española de la Guardias Civiles, se denuncian los problemas existentes que afectan al estado de las carreteras, el comportamiento de los conductores y los peatones, y el estado general de los vehículos.
En el primero de los apartados destaca el mal estado general de las carreteras. El estudio ha detectado que el 10% de las vías presentan una situación muy deficiente, con un pavimento que registra el mal estado en los últimos 20 años. A ello hay que añadir las deficiencias detectadas en las señales de tráfico “de las cuales se renovarán más de 374.000, y en las que hemos identificado que el 72% tienen el reflectante caducado”, señala Lagunar. El estudio también refleja que las barreras de contención o guardarraíles suspendidas por su deficiente estado “cuando estos elementos de seguridad pasiva son verdaderos verdugos para los usuarios vulnerables de la vía”, subraya.
En cuanto a los agentes de tráfico de la Guardia Civil concluyen que se ha detectado una importante falta de personal, “y tienen menos medios y menos formación que nunca”, Así, en 2008 más de 10.000 agentes, en 2017 había 8.672” y actualmente incluso menos”, apunta Lagunar.
Según el secretario de la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC), Fernando García Poves, “es una situación que nosotros desde la Asociación ya veníamos advirtiendo desde hace tiempo, en relación a cuatro factores determinantes, que están poniendo en riesgo la seguridad vial: el mal estado de muchas carreteras; vehículos muy antiguos y sin un correcto mantenimiento; un aumento de la desobediencia de las normas de tránsito más elementales y una reducción de los agentes de tránsito que dificultan las áreas de seguridad en la vía pública”.
Factor humano
García coincide con las conclusiones de los informados en cuanto a la importancia del factor humano en la accidentalidad, señalando un desconocimiento e incumplimiento reiterado de las principales normas de circulación. En este caso se ha detectado que el 74% de las víctimas en accidentes de tráfico son consecuencia del incumplimiento de las normas de circulación. En este apartado José Lagunar advierte que “el peatón también es responsable de su propia seguridad al hacer uso de la vía pública. Los despistes, las acciones temerarias, la infracción de las normas de forma deliberada o los excesos son multitud de factores en los que en la convivencia vial pueden poner en peligro la seguridad vial”. Así, se ha detectado que un 49% de los peatones fallecidos en accidente de tráfico estaban incumpliendo alguna norma.
También se detecta que las campañas publicitarias de seguridad vial “no están conectando con la gente, y tienen un mal resultado, porque no consiguen reducir las cifras de accidentes y fallecidos”.
Otras deficiencias son que los medios para la obtención de la licencia de conducción y su renovación incluyen un aumento en la mejora y requisitos, y la educación a través de tal faceta de la vida no está regulada y distribuida por comunidades minoritarias. Carece de evaluación y seguimiento, dependiendo de la propia voluntad de esos colectivos que de ninguna administración pública.
Finalmente, respecto al “factor vehículo”, se encontró que el 40% de los coches que circulaban en los coches españoles ya no pasaban la ITV, y la antigüedad del parque es muy alta, con 13 años de media y con un 39,6 % del parque móvil con más de 15 años, esto es 9,7 millones.
Esta antigüedad tiene su reflejo en la accidentalidad porque, según los datos facilitados por la Fundación para la Seguridad Vial, Fesvial, a 70 km/h, la distancia de frenado de un coche antiguo con las ruedas desgastadas es hasta un 53% superior a la del mismo chequea con los neumáticos en buen estado. Además, los accidentes de los coches antiguos tienen un 23% más de incidencias relativas a los neumáticos y un 68% con respecto a los frenos.
El Semáforo de la Seguridad Vial, en cualquier factor del vehículo, se determina además por el estado en el que se producirá una marca de verificación. El semáforo se encuentra en rojo, porque en España “no hay un correcto mantenimiento del vehículo, un correcto estado de neumáticos, frenos o suspensiones”, señala Lagunar.
Las últimas cifras de la DGT
Según la Dirección General de Tráfico, durante el mes de abril se han registrado en la carretera 90 siniestros mortales en los que han desaparecido 99 personas, esto es 25 más que en el mismo mes de 2019.
Esta siniestralidad se ha producido en un contexto de mayor número de desplazamientos (+6%); concretamente, se han registrado en todo el mes 37,6 millones de movimientos de largo recorrido, frente a los 35,4 millones de abril de 2019.
Un total de 76 fallecimientos son consecuencia de siniestros ocurridos en rutas convencionales, de los cuales 23 se registraron en rutas de alta capacidad (autovías o autopistas), fecha habitual.
En función del siniestro tipo, y según las últimas cifras de la DGT, las colisiones se incrementan de 38 víctimas mortales en abril de 2019 a 46 de este año. También aumentan las salidas de vía con 36 fallecidos, frente a las 26 registradas en el mes de abril de 2019.
Según el medio de desplazamiento si se comparan los registros de abril, en el mismo mes de 2019, se incrementaron los desaparecidos vulnerables (38 frente a 23) y de mayo significativo en motos y peatones. Respecto al uso de los sistemas de seguridad, 16 desaparecidos no hacían uso del cinturón de seguridad en el momento del accidente.
