La emisión de la serie documental sobrio Pedro Sánchez va a suponer un quebradero de cabeza para las productoras que decide emitir el próximo año, como está previsto que tenga éxito. Así lo aseguran las fuentes jurídicas consultadas, que cuestionan que los episodios puedan llegar a las pantallas en periodo electoral, comprendiendo por este no solo los quince días de campaña, sino el tiempo que transcurre desde la convocatoria de elecciones hasta su celebración. Teniendo en cuenta que el próximo año hay municipios y autonómicas y que predictemente a finales de año se convocarán las generales, la polémica está servida. El calendario para la emisión es, por tanto, “esencial”. Los juristas sondeados coinciden en que exhibir el documento en las condiciones aludidas supondría una «ruptura del deber de neutralidad de los poderes públicos» y que, aunque el convenio firmado el pasado 6 de septiembre estipula que la serie responderá «a los principios de objetividad y ausencia de carácter propagandístico”, hay un elemento de propaganda “claro”. Noticias Relacionadas estandar Si Moncloa decide cambios en la serie documental sobre Pedro Sánchez Javier Chicote estandar Si Congreso de los Diputados Ofensiva parlamentaria del PP contra la serie sobre el “día a día” de Sánchez Juan Casillas Bayo Recuerda, además, que la propia Ley del Régimen Electoral General (LOREG) establece que las televisiones privadas tendrán que respetar, además del citado principio de neutralidad, el de proporcionalidad y pluralidad informativa. En este caso, dicen, se está utilizando La Moncloa para promocionar al partido de su presidente, el PSOE, lo que “indeduremente” influye en los electores. El órgano competente para dirimir el conflicto hipotético que podría planetarse es la Junta Electoral Central, que ya hace dos años multó a Sánchez para la entrevista que Ferreras le hizo precisamente en La Moncloa.
