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Habrá comprobado que entre las medidas adoptadas por el Gobierno hay muchos subsidios, pero ninguna bajada de impuestos, a pesar de haberse comprometido a ello el presidente en la reunión de la Conferencia de Presidentes. Tampoco hay ninguna medida destinada a recortar algún gasto, por pequeño que sea o por su evidente inutilidad, que, haberlos ‘haylos’ a paletadas. Exactamente 60.000 millones, según el IEE. Todos, o al menos yo que soy un ingenioso, supusimos que ello era debido a su deseo de cuidar las cuentas públicas. no puede Ayer pudimos comprobar que es pura cicatería y purito miedo a que cualquier recorte le estigmatique frente a la opinión pública.
Todo el país está abrumado por la subida de los
precioso. Los de la energía, la cesta de la compra, el transporte y de todo lo que se le ordena. ¿Todo el país abrumado? Incierto. El Gobierno está encantado pues sus arcadas están llenas. El Ministerio de Hacienda, en todo su esplendor y sin el mínimo atisbo de vergüenza, presentó ayer la mayor reducción del déficit público acaecida en la historia presupuestaria española desde que existían registros.
Desde el 10,27% del año 2020 al 6,87% del 2021. En números, 31.000 millones, en porcentaje, un 28%. ¿Como es posible? La ministra se empeña en decir que el milagro se ha producido gracias a la bondad de las medidas de política económica. Es una pena, pero creo que debería rebuscar más en el baúl de las razones. La previsión de incremento que realizará el Gobierno para 2021 será del 6,5% y fue de tan solo un 5,1%. Tan es así, que en la previsión de ingresos realizada en septiembre se equivocó en 8.500 millones por defecto.
¿Cómo es posible entonces el milagro de la recaudación? Pues porque hay muchos impuestos, la mayoría, que se aplican de manera proporcional, de tal forma que la subida de los precios y en especial los de la energía le han permitido une una recaudación inesperada. El IRPF sufrió un 7,5% (de eso puede estar satisfecho pues es consecuencia de la evolución del empleo); pero el IVA sufrió un 14,5% y los impuestos especiales un 5%. Hacienda se llevó del sistema 31.000 millones no previstos. Súmele la erosión que provoca la inflación este año en su bolsillo y verá como quedamos nuestros. ¿Desnutridos? Si, algo así.
