La tragedia de Hillsborough, donde 96 aficionados de l Liverpool fallecieron por aplastamiento en 1989 y un millen de personas resultaron heridas, supuso un antes y un después en la manera de disfrutar del fútbol en las gradas inglesas, pero también en las del restaurant de Europa . Los países soportaron los controles de acceso, los campamentos acondicionaron sus aforos a normativas más seguras y la UEFA, al igual que numerosos gobiernos, acabaron prohibiendo a los hinchas la tradición de ver de pie los partidos, costumbre con la que nació un deporte de fuerte Raíz popular. Más décadas después de la decisión que cambió la fisonomía de los estadios, la UEFA ha anunciado que a partir de la próxima temporada pondrá en marcha un programa experimental en los encuentros de sus competiciones para que los seguidores puedan animar estando pie sin ser sancionados.
La autorización del organismo que preside Aleksander Ceferin se debe a que las autoridades de países como Alemania, Austria o Francia han ido levantando parcialmente en los últimos años el veto a las gradas de pie. También en Inglaterra desde principios de 2022, en gran medida por la presión de la hinchada del Liverpool a ríz de confirmar oficialmente la manipulación de los informantes policiales en los que responsabilizó a los aficionados ‘reds’ de la tragedia de Hillsborough. Investigaciones posteriores concluyeron, sin embargo, que los organizadores y los encargados de la seguridad fueron los culpables. El exceso de aforo en el que el partido ante el Nottingham Forest resultó en letalidad.
Pero esta vuelta a las ‘viejas gradas’ no será total, según explicó recientemente la UEFA en un comunicado. Dado el carácter experimental de este programa, se limitará, al menos en su primera temporada, a los clubes que forman parte de las cinco primeras federaciones de la clasificación de la UEFA (Inglaterra, España, Italia, Alemania y Francia) en las que las Las localidades de pie ya están autorizadas y se aplican a nivel nacional. Se beneficiarán, por tanto, las hinchadas inglesas, alemanas y francesas, pero no las españolas ni las italianas.
La demanda de la vuelta a ese fútbol más ‘genuino’ se ha unido a numerosas asociaciones de aficionados de toda Europa. Uno de ellos es la Federación de Accionistas y Socios del Fútbol Español (Fasfe), que muestra a ABC su satisfacción tras la decisión de la UEFA. “Aunque en una primera fase no afectará a España, es una gran victoria. Es un avance ante la evidencia encontrada en la última década en varios países europeos de que las gradas de pie son seguras. La prestación de estadios solo con localidades de asiento en las competiciones europeas será un recuerdo obsoleto de las ideas sobre seguridad que imperaban desde hace décadas”.
Las finales, excluidas
La UEFA no solo limitará geográficamente las gradas de pie. A medida que vayan avanzando sus competiciones volverán a desaparecer. “El programa se llevará a cabo Durante la fase de grupos y las eliminatorias hasta las semifinales de las competiciones masculinas de clubes de la UEFA de 2022-23. Se excluyen las finales”, informó en su comunicado. Al final de la temporada, y extremadamente en los informados presentados por los encargados expertos, el máximo organismo del fútbol europeo evaluará las conclusiones y presentará los resultados a su Comité Ejecutivo, que decidirá sobriamente la continuación y posible ampliación del programa para seguir ampliando la vista a las gradas de pie. Su presencia aumenta el nivel de cibelios y animación en los estadios, por lo que numerosos clubes de toda Europa venían reclamando su recuperación.
La legislación nacional es importante en este asunto. La Ley del Deporte de 1990, así como un Real Decreto de 2007, establecieron que las calificaciones de los estadios deben tener asientos y estar numeradas en las categorías profesionales. Pese a ello, cada fin de semana, especialmente en los fondos, numerosos aficionados presentan los partidos estando de pie. “Lo que es peligroso a día de hoy es lo que pasa en prácticamente todos los estadios de categoría profesional de nuestro país, que miles de aficionados y aficionados siguen los partidos de pie sobre butacas. Esto provoca numerosas lesiones cada temporada, además de molestias a la parte de la afición que, en esas secciones, quiere ver los partidos sentados”, advierten des de Fasfe.
“La modalidad de gradas de pie seguras, conocida como ‘rail seat’, sería legal un día de hoy en todos los estadios españoles, el hecho de que San Mamés y El Sadar cuenten ya con ellas sin problema lo atestiguan”, afirman desde esta asociación.