España y Francia no modifican la obra de Roald Dahl

La polémica tiene por su parte la revisión de los libros infantiles del escritor británico Roald Dahl, que han sido retocados en aras de la corrección política, no serán modificados en sus ediciones en español. También la gala editorial de Gallimard se desmarcó de la decisión de que Puffin, la división naciente de Penguin Random House en Reino Unido, ha tomado junto a sus herederos, la Roald Dahl Company, que afectó a todas las palabras que dejó en sus obras relacionadas con el peso, la salud mental, la violencia, el genero y la raza.

Debido a la controversia, fue criticado por escritores como Salman Rushdie e incluido el primer ministro británico, Rishi Sunak, Alfaguara infantil y juvenil mantuvo una reunión con la Roald Dahl Company. Tras ella, tomó la decisión de mantener “sus ediciones con los textos clásicos del autor sin modificar sus publicaciones en castellano“, lo que engloba sus publicaciones en España y en Latinoamérica.

También Santillana, que desde hace unos años publica la obra de Dahl bajo el sello Loqueleo, ha emitido un comunicado para señalar que no van a adaptar sus libros, que llevan formando parte de su catálogo desde 1978, año en el que llevaron a las librerías ‘Charlie y la fábrica de chocolate’ en inglés. “Siempre hemos defendido la literatura infantil y juvenil y los libros publicados sin atender ningún tipo de censura, con independencia de las modas y circunstancias del momento. Editamos libros sin complejos, atemporales, que no subestiman al lector«, han puntualizado en el texto citado.

En Francia, Gallimard, propietaria de los derechos de la obra del escritor británico en inglés, ha tomado el mismo camino que España. La directora de la división infantil de la editorial, Hedwige Pasquet, saludó la polémica y declaró en una entrevista en ‘Le Figaro’ que respetaba los títulos originales del autor. “Si pudiéramos hacer algo, sería contextualizar la obra de Roald Dahl, es decir, la época en que fueron escritos sus textos“, ha matizado.

Pasquet ha señalado que la Roald Dahl Company se había circunscrito al mercado inglés y que habían manifestado que deseban respetar la cultura de cada país. El editor ha confirmado que el autor británico nunca habría dado luz verde a esos cambios en su obra. En referencia a que el propio Roald Dahl hizo un cambio en ‘Charlie y la fábrica de chocolate’ (los pigmeos se fuertes en los Oompas Loompas), ha indicado que “si el autor hace un cambio, hay que respetarlo. Pero ¿cambiar hoy todo un texto sin su consentimiento? No».