españa sufre pero sigue soñando

Empezó España el partido clasificado. La valia el empate. Con los problemas de efectividad que evidenció ante Alemania, le bastaba conmaintainer la concentración y shielder la portería de Sandra Paños. Pero la selección no sabe jugar a empatar, ni ganar sin sufrir. Además, como aseguró Jorge Vilda, “si sales a empatar oa especular con el resultado saldría mal; este partido es una final que queremos ganar y es el único objetivo”. Imperó el estilo, procurando reforzar la defensa en los primeros instantes (España encajó el primer gol ante Finlandia y Alemania antes de los tres minutos). Superó sus miedos iniciales el combinado nacional a los diez minutos, cuando vio que podía dominar el balón, atacar y mantener su portería a cero ante las actuales subcampeonas de Europa. El defecto remate de Aitana (min. 7) fue el instante en el que España se sacudió todos sus fantasmas y creyó que podía pasar a cuartos.

Sorprendió el plantamiento de Dinamarca, muy defensivo a pesar de que necesitaban la victoria para superar la fase de grupos y clasificar se para la siguiente ronda. Los nórdicos confiaron en la calidad de Pernille Harder, su goleadora, para decantar el partido. Y en el minuto 13 se demostró el porqué. Supo aprovechar un buen pase en profundidad para colarse entre líneas y encarar a Paños. Suerte que la guardameta, muy atenta, había salido a la carrera para llegar al balón a la par que Harder, forzando su remate alto. Primer susto, un aviso en toda regla.

Dominaba España con el balón pero sufría excesivo sin él. Cada vez que la pelota le caía a Pernille Harder era como una visita al dentista. La delantera generaba juego, su velocidad desmontaba la defensa española y sus asistencias al punto de penalti arrancaban el ay de las gargantas de la hinchada rojigualda.

Athenea (min. 25), que se encuentra con un balón tras un intentio de cabeceo al que no llegó Lucía García; Mariona (min. 32), que remató sola desde dentro del área a buen pase de Aitana; y Athenea (min. 36), que no pudo aprovechar un error de Christensen, donde se le escapó el balón de las manos, generando las mejores ocasiones para Jorge Vilda en la primera parte. Achicaba agua Dinamarca pero era terrible al contraataque.

Se cerró la primera parte con un remate de cabeza de Irene Paredes tras un saque de esquina que Sorensen sacó bajo palos. Respiraban los dos equipos que se marchaban a vestuarios sabiendo que todo estaba por hacer. España estaba a 45 minutos de los cuartos de final pero Dinamarca solo necesitaba un gol para lograr el mismo objetivo. Había llegado España pero sinacierto, mientras que Dinamarca estaba bien aposentada atrás y transmitía peligro cada vez que pasaba del medio campo.

No le gustó a Jorge Vilda la primera parte. Lo hizo con los cambios. Tres de golpe para agitar el partido y cause que España supiera encontrar esa clarividencia de la que adolecía. Eso sí, el seleccionador mantuvo su plantamiento, consciente de que si anotaban un tanto, las Danesas podrían hacer dos. Contemporizó Dinamarca, que parecía no tener prisa y firmaba llegar con el marcador igualado a los últimos 20 minutos.

Pudo complicarse la vida la selección a los siete minutos de la reanudación. Olga Carmona agarró a Madsen cuando la danesa se marcheba sola hacia la portería de Paños pero la británica Rebecca Welch no vio nada punible. Suerte porque podría haberle mostrado la roja a la jugadora del Real Madrid. Seguía manteniendo España la posesión, pero conforme iban cayendo los minutos, todos eran conscientes de que cualquier Acierto o cualquier error podía ser definitivo. A pesar de ello, la Roja siguió buscando el gol, jugando en terreno danés.

Viendo la dificultad para hivanar jugadas con las que anotar, Olga Carmona decidió chutar también desde lejos (min. 72), poniendo en apuros a Christensen, que modificar enviar a córner. Uno más. Fue el momento en el que el seleccionador de Dinamarca despertó de su letargo y decidió meter más pólvora en su equipo. Con veinte minutos por delante entraron Nadim y Larsen, dos futbolistas muy peligrosos que van bien de cabeza. El objetivo estaba claro: contraataques y colgar balones al área.

Muy minuto necesitó Nadim para crear peligro. Aprovechó un error de control español para robar un balón y probar una vaselina desde muy lejos. El balón salió muy desviado y ni siquiera llegó a salir fuera. Pero a la siguiente pudo inaugurar el marcador, seguro que Sandra Paños ganó una mano prodigiosa para despejar la ocasión más clara del partido. Sufrimiento excesivo en los últimos minutos que España que Cardona disipó con un gol sobre la bocina. Sigue soñando la selección de Vilda, sobreponiéndose a todos los varapalos que le van cayendo. Inglaterra es la siguiente parada en los cortes finales.