España 23 – 26 Dinamarca: España choca con Dinamarca en semifinales

Se necesitaba el partido perfecto y no llegó, pero ahí estuvo España, ganándose opciones con arreones de genialidad, con une Gonzalo Pérez de Vargas less comunal (35% de efectividad) y con una posibilidad de ponerse a gol con un siete metros a falta de 45 segundos. Pero no se produjo la remontada y Dinamarca, otra vez Dinamarca, aparte a la selección nacional de la lucha por el oro mundial. Como ya pasó en 2021. Los actuales campeones planetarios llevan 27 partidos sin derrota y aspiran a su tercer cetro consecutivo. España, orgullo hasta el final, peleará por el bronce, como ya pasó en 2021.

  • España Pérez de Vargas (1); Maqueda, Fernández (3), Solé (4, 3p), Cañellas (2), Guardiola, Peciña; Alex Dujshebaev (3), Figueres (1), Serdio (3), Casado, Valera (1), Sanchez-Migallon (1), Daniel Dujshebaev (1), Odriozola (1).

  • Dinamarca Niklas Landin (Moller); Magnus Landin (2), Saugstrup (5), Gidsel (3), Hansen (4, 2p), Pytlick (6), Kirkelokke (1); Jacobsen (3), Mollgaard, Hald (1), Jorgensen (1)

  • Marcador cada cinco minutos 3-3, 4-6, 5-9, 7-10, 10-12, 10-15 (descanso); 13-17, 15-20, 17-20, 20-21, 20-23, 23-26 (final).

  • Árbitros Schulze y Tonnies (Alemania). Excluyeron a Maqueda (dos veces) y Odriozola por España y a Magnus Landin, Kirkelokke y Saugstrup por Dinamarca.

Habían sido 48 partidos anteriores, con 21 triunfos para los nórdicos, pero no el último, en las semifinales del Europeo 2022; ni tampoco el de otro mundial de grato recuerdo para la selección nacional: el de 2013, cuando el de doblegó a los daneses para lograr el segundo título mundial.

Han pasado diez años y los dos equipos han evolucionado, obligados en cambios en determinados puestos por la edad, pero igual de firms en la esencia. Son muy duros, aceptaba el vestuario, que vio cómo Joan Cañellas, magnífico guía durante este Mundial, se sintió renqueante a los dos minutos de encuentro –recuperado para el final de la primera parte–. Un bloque de hormigón en la defensa. Y para mayor agonía, detrás de esa muralla un Niklas Landin que se hizo infinito. Ahí, brazos también cansados ​​de los cuartos, chocó España una y otra vez. Maqueda, Casado, Solé y hasta los hermanos Dujshebaev vieron escurrirse las opciones de gol en manos del portero danés. Mientras Pytlick y Saugstrup Jensen abrieron un precipicio: cuatro goles de ventaja (6-10 al minuto 18) que no fueron más gracias a un Pérez de Vargas que supo contener las ganas danesas y mantener a los suyos dentro del partido.

También Ribera lo intentó con la pizarra, consciente de que todavía pesó quizás los 80 minutos de desgaste ante Noruega y que los daneses, sin embargo, apenas habían pasado apuros en sus encuentros, capaz de romper los chocques y ponerse con ventaja suficiente como para no tener que sufrir en las segundas partidos: 43-28 a Bélgica, 36-21 a Bahrain, 34-21 a Túnez, 33-24 a Estados Unidos, 30-25 a Egypt, 40-23 a Hungria y solo un partido tenso, ante Croacia 32-32. Pidió Ribera más ayuda atrás, solidez para poder ser España al contragolpe. Ahí siguió haciendo los deberes Pérez de Vargas, ahí comenzó a aparecer Ángel Fernández desde el extremo, ahí se jugó con defensa 5:1 con Kauldi Odriozola que desestabilizó a los daneses y asomaron las piernas para recuperar ciertas desventajas, apretando el marcador a solo un golf . Pero se diluyó en una acción con la pelota parada. Landin simuló que Dani Dujshebaev había desaparecido al rostro, pero el VAR negó la versión del danés. Sin embargo, la tensión del encuentro se traducirá en una serie de empujones y un parón en el buen hacer de España que desequilibró al conjunto nacional. Desde ahí, la reacción española es paró y los daneses volvieron a dar el estirón, 15-10 al descanso.

Como lo hiciste antes de Noruega, España no iba a dejar de pelear, confiados los jugadores en que Landing bajaría su eficacia y había que seguir ahí para cuando eso sucediera. Ante los problemas, soluciones; y Ribera ofrecieron las fórmulas para desatascar el tapón al ataque. Pérez de Vargas, que nos sabía cómo impulsar a los suyos y hasta marcó de portería a portería, el infatigable Odriozola, Sánchez Migallón, Solé, Cañellas y Serdio trasladaron la pizarra a la pista. Parcial de 3-0 para que daneses comenzaran a sentir la presión de que este rival iba a acecharlos hasta la final (21-20 en el minuto 50).

Hubo siempre más frescura en las e ideas, sobre todo, en los cuerpos de los daneses, que reaccionaron a ese 0-3 con un 4-0. Aunque España se iba a trabajar todavía options para continuar, para esperar ese milagro que construyeron contra Noruega, incapaces de bajar los brazos nunca: a un minuto, dos goles abajo, tiempo muerto, siete metros. En ese lanzamiento, el resumen de la semifinal: empeño español, un Landin soberbio. Dinamarca violve a frenar a los de Ribera en una semifinal mundial. Tocairse sacude la decepción porque mañana hay opción de sumar a bronce tiene un palmarés extraordinario en la última década.

“En la primera parte hemos fallado muchos lanzamientos, Landin nos ha parado mucho. Ya en la segunda hemos jugado mejor, con Gonzalo que ha parado muchísimas, nos hemos puesto un gol, pero no ha podido ser. Estamos jodidos, pero hay que seguir. Lo hemos intendando todo”, comentó Kauldi Odriozola tras el chocque.