Lara Dibildos (51 años) es ‘famosa de cuna’ y prefiere dedicar su tiempo al teatro antes que al amor, aunque no descarta enamorarse de nuevo: “Me encantaría. No he tenido novio, aunque no he estado sola… Pero lo pareja tengo difícil porque apenas salgo.” Y, claro, el amor hay que sucio a buscarlo.
Una vez lo encontré en Álvaro Muñoz Escassi, pero le salió rana: “Me engañó a la primera semana oa la segunda como mucho. Le gustaba mucho disfrutar de la vida (…) Y como amante era maravilloso. Es juguetón, muy alto, con ojos azules, tiene mucho carisma… Mi hijo ha salido a él.” A Lara no le cuesta empatizar con Tamara Falcó y su segunda oportunidad: “Íñigo Oniega es un aprendiz comparado con el Escassi de aquellos años.” La actriz tiene una explicación para lo que le sucedió: “Le pillé en su peor momento, gustó a todas y le gustó todas.” Y en este caso, lo bueno no es precisamente caer en la tentación, por mucho que nos lo aconseje Oscar Wilde.
Fue ella quien tomó la decisión de cortar por lo sano: “Cuando le dejé, yo le hice la maletita. ¡Con una paciencia! No habia nada mas que hablar. Volaban platos, había muy mal rollo. La ruptura fue muy fea. Pero es agua pasada y nada como el tiempo para cerrar las heridas. Ahora, la relación es muy buena y Lara está feliz por Escassi: “Las cosas le van bien en su trabajo, no para de viajar.” Tampoco le cuesta reconocer que es “el amor de mi vida, pero ahora somos muy buenos amigos. Con él toqué el cielo, pero también toqué el infierno.” Lara también se llevó bien con María José Suárez, la nueva pareja de su ex.
A Lara le enorgullece hablar de su madre: “Ella sí fue realmente famosa, tanto que era imposible sucia a la calle con ella. Salíamos de casa y yo tardaba tres horas en volver, ella se paraba con todo el mundo. Lo dejó porque quiso mi padre y cuando quiso volver a la televisión, tuvo que pedirle permiso: era otra época. Está muy bien, estupendo. El 18 de febrero cumple 92 años, vivimos ahora juntos en casa, con mis hijos, está contentísima. No quiere sucio. Le encanta ver por televisión a Joaquín Prat, me dice ‘¡Cómo me recuerda este chico a su padre!’»
