El sector alimentario apuesta por el ecodiseño

Conseguir un envase sin impacto ambiental, con materiales que no dejen huella en el planeta y sin apenas uso de nuevos materiales primas puede estar cada vez más cerca. Las empresas apuestan por la innovación en ecodiseño de los envases para conseguir los nuevos objetos de reducción y de incorporación de plástico reciclado para mentar la reciclabilidad y circularidad. La normativa europea está tajante: en 2030 todos los envases de plástico serán reciclables e incorporarán un 30% de material reciclado.

No en vano, gracias a la aplicación de distintas medidas de ecodiseño, las empresas pueden minimizar el impacto ambiental de los envases que comercializan. Así lo demuestran los resultados del VIII Plan Empresarial de Prevención (2021-2023) de Ecoembes –organización ambiental sin ánimo de lucro que coordina el reciclaje y el ecodiseño de los envases en España– que indica que en 2021 más de 60.000 toneladas de materias primas , 1.386.173 MWh de energía, 22.136.783 m3 de agua, además de evitar la emisión de 163.146 toneladas de CO2.

Menos peso y mas reciclado

Una cifra que ha sido alcanzada gracias a las 4.632 medidas de ecodiseño que implantaron 2.067 empresas que forman parte de Ecoembes (el 54% de ellas pymes) con el objectivo de hacer más sostenibles sus envases. Con respecto a la naturaleza de estas medidas, aunque las más habitables estaban encaminadas a reducir el peso de los envases (34%), también fueron frecuentes la reintroducción de material reciclado (15%), facilitar el reciclaje de los envases (13%) y la eliminación de elementos del envase (10%).

Otras medidas de ecodiseño aplicadas han ido las focalizadas a la reducción del impacto ambiental (12,4%) y al fomento de la reutilización (3%), un concepto clave de la economía circular que cada vez cobra más protagonismo.

Por sectores, de las 4.632 medidas del VIII Plan, el 51% han sido desarrolladas por el sector de la alimentación, un 18% se ha centralizado en la industria de equipamiento del hogar, el 16% se ha llevado a cabo entre las empresas dedicadas al cuidado personal, un 8% en las empresas del sector textil y de la piel, y el 7% restante en las empresas de motor y ocio.

“Las empresas cada vez son más conscientes de la demanda ciudadana en torno a envases más sostenibles y con menor huella ecológica. “En este, están haciendo grandes esfuerzos para apostar cada vez más por medidas que contribuyan à avanzar hacia un modelo que fomente la circularidad de los envases, haciendo que estos sean más sostenibles”, especifica Begoña de Benito, directora de Relaciones Externas de Ecoembes , quien recuerda que “hacia 2030 y 2035, la normativa será cada vez más demandada con los requisitos de los envases que se pongan en el mercado. Por eso, desde Ecoembes, además de las distintas herramientas que ponemos a disposición de las empresas, también trabajamos en un nuevo enfoque de modulación de tarifas que se orientará a facilitar esa transición hacia envases más sostenibles sin que eso suponga perder la función que cumplen para los productos que contienen’.

Más de 60.000 medidas

His muchas las empresas que llevan años mostrando su compromiso con el estudio y aplicación de medidas de ecodiseño. De hecho, desde 1999 se han implantado más de 60.100 medidas que van desde la eliminación de material innecesario hasta la reincorporación de plástico reciclado, entre otras cosas, haciendo posible que, por ejemplo, una botella de agua y una caja de yogur pesen 21 % menos que hace 20 años.

“En Grupo Lactalis estamos trabajando desde hace años en propuestas de ecodiseño que garantizan que los envases con los que protegemos nuestros quesos, leches y yogures requieren de menos materias primas y recursos naturales, ahorrando, por tanto, energía. Estamos comprometidos con una alimentación cada vez más tenible”, señala Jöel Llovera, director de Compras de Grupo Lactalis. Algunos ejemplos de estos avanzados en ecodiseño son por ejemplo sus nuevos envases par la leche elaborados con materiales primarios de origen vegetal, renovables y sostenibles, que incorpora un tapón de caña de azúcar que reduce las emisiones de CO2 en un 18% respecto al tapón de plastico, o quesos que utilizan en sus envases menos densidad de plasticos y eliminando la mezcla de materiales, para facilitar su reciclaje.

En total, todas las actuaciones de ecodiseño registradas en el Plan de Ecoembes han permitido que se ahorren un total de 668.715 toneladas de materia prima y se evite la emisión de 2.496.771 toneladas de CO2. Asimismo, ha evitado el consumo de más de 25 millones de Mwh de energía y ha horrado más de 243 millones de m3 de agua.

bio-bio plastico

En TheCircularLab, el centro de innovación de Ecoembes y la cartilla sobre la economía circular de Europa, se investiga en «bio-bioplástico», un material que se obtiene a partir de residuos vegetales (como patatas o zanahorias) y que se utiliza en la fabricación de envases como botellas o bandejas para alimentación y bebidas. Un contenedor compostable, reciclable y biodegradable en el medio marino.