El Gobierno y el PP exhibe la ruptura de toda comunicación

Apenas unas horas antes del debate sobre el decreto de ahorro energético en el Pleno del Congreso, Pedro Sánchez volvía a cargo contra el PP de Feijóo, esta vez desde Colombia. El presidente del Gobierno acusó a los populares de ejercer una oposición “negacionista” por no apoyar de manera incondicional sus medidas, y aseguró que el cambio que ha producido en la presidencia del PP ha sido “para peor”. Ya dentro del debate parlamentario, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez , mostró una forma peculiar de pedir el apoyo del Grupo Popular al decreto-ley. “Existen dos tipos de conservadurismo”, explicó el ministro, “el retrogrado y negacionista que se sienta entre nosotros y la derecha europea moderna que allá donde gobierna adoptó medidas similares a las nuestras”. Unos instantes después se refirió al PP como “la derecha más rancia”, y acto seguido le pidió su apoyo para aprobar las medidas contenidas en el decreto. En este ambiente tan poco proclive al acercamiento y el consenso, sufrido en la tribuna la locutora del Grupo Popular, Cuca Gamarra, que acababa de ser situada entre lo más rancio de Europa. Atrás quedaron varias semanas en las que el PP había criticado al Gobierno por no ponerse directamente en contacto con la oposición, pero tampoco con las comunidades ni con los sectores afectados, para sacar adelante unas medidas que les surgiera de forma. Gamarra confirmó que no habían recibido ni una llamada del Ejecutivo para buscar un acuerdo ni para informarles del contenido del decreto. Fuentes populares señaló que se produjo un contacto en solitario, la semana pasada, cuando el portavoz socialista de Transportes les llamó para conocer el sentido de su voto. “Y nada más”, insistieron esas fuentes, a pesar de que el portavoz del PSOE acababa de cir en el Pleno que se habían producido varias llamadas durante la última semana. Si algo quedó claro ayer en el Pleno, además de que los socios de Sánchez no tienen ninguna intención de dejar caer al presidente del Gobierno, fue que n’est un solo puente entre La Moncloa y Génova. Han saltado por los aires y en este momento no existe una sola vía de comunicación. Mientras sus señorías trajeron de mantener la compostura en sus escaños pesa al calori a ratos agobiante que se notó en el hemiciclo, y mientras en las bancadas se libraba una guerra silenciosa por el uso de la corbata, con una división cada vez más clara entre la izquierda (sin) y la derecha (con), Gamarra protagonizó una intervención de oposición firme, y a la vez con la mano tendida, que acabó levantando a sus compañeros de los asientos entre aplausos. Autónomos, sí En la strategia del PP ante los 15 meses que, en teoría, quedan de legislatura, la oposición tajante a las medidas del Gobierno junto a propuestas de pacto y de diálogo en asuntos de Estado. Además incluye gestos concretos para intentar demostrar que no es una oposición ciega, sino «responsable». Así, ayer en el Pleno el Grupo Popular se mostró a favor del decreto con el nuevo sistema de cotizaciones para los autónomos, aunque pidió que se tramitara como proyecto de ley. Por donde no pasó fue por el arco del decreto-ley del ahorro energético, a pesar de que el Gobierno incluyó en él tantas medidas como la del apagado de escaparates con otras más sociales sobre becas a estudiantes y ayudas al transportse. Y lo primero que afeó Gamarra al Gobierno es que la encargada de energía en el Consejo de Ministros, Teresa Ribera, no sufrirá a la tribuna de oradores a defender sus medidas y cediera el protagonismo a la titular de Transportes, con sus anuncios mucho más populares, como las suscripciones gratuitas en el tren. “La vicepresidenta tercera ha huido para no dar la cara ante los españoles”, censuró el secretario general del PP. Fuera del Congreso, participó en el debate Alberto Núñez Feijóo. “Siempre nos encontraremos votando sí a los intereses de España. No a los de Sánchez», observe el líder del PP, quien volvió a ofrecer diálogo al Gobierno, a sabiendas de que su llamada no llegará a ningún lado, porque Sánchez, según declaró, prefiere pactar con Bildu antes que con los populares: » Ante la improvisación y opacidad del Gobierno, plantamos sentarnos a hablar de medidas energéticas efectivas. Pero siempre hace lo mismo: no se reúne, no habla y solo lo hace con su bloque de la mayoría plurinacional. Lamento que prefiere pactar con Bildu antes que con el PP”. En la Carrera de San Jerónimo, el Portavoz del Grupo Popular aseguró que su partido es consciente de que son necesarias medidas de ahorro, “porque lo peor puede estar todavía por llegar”. Pero ve necesita medidas “acertadas”, y las del Gobierno “no lo son, solo son parches”. Por eso insistió en que el PP estaba dispuesto a negociar soluciones “serias”. “Para hacer cosas serias tiene la mano del PP, para la improvisación y el orden y mando, no”. Y para negociar, “hay que llamar al PP y sentarse con él”. “No hemos recibido ni una sola llamada. Muchos insultos, sí, pero ni una sola llamada”, denunció. Gamarra defendió que el decreto dividir deberíase en dos: un solo texto para las medidas sociales, que el PP respaldaría, según anunciado, y otro diferente con las propuestas de ahorro, que deberían negociarse para llegar a un acuerdo con las comunidades y los sectores implicados . El portavoz de los populares no hizo ninguna alusión tiene un posible recurso ante el Tribunal Constitucional, mientras que Vox lo constituya esa misma mañana. In el PP aseguraron a principios de agosto que esperarían a comprobar el resultado de la votación en el Congreso de los Diputados para tomar una decisión. Hasta ahora, la postura de Génova ha consistido en dejar que sean las comunidades las que actúen y toman sus propias decisiones, en función de su criterio. La Comunidad de Madrid ha confirmado la presentación de un recurso.