El equipo de Izpisua regenerará el hígado dañado en ratones con células reprogramadas

Un equipo de científicos españoles ha aconsejado mejorar y acelerar la regeneración del hígado dañado en ratones, donde se pueden conducir a nuevos tratamientos para curar hepáticas.

En concreto, el equipo dirigido por Juan Carlos Izpisua, del Instituto Salk (EE.UU.) y la UCAM, ha conseguido rejuvenecer parcialmente las células de la hidratación, permitiéndoles regenerar rápidamente el tejido dañado.

Los resultados, publicados en la revista Cell Reports, revelan que el uso de moléculas reprogramadoras mejora el crecimiento celular y la regeneración del tejido hepático en ratones.

Estrella Núñez y Rubén Rabadán, coautores del artículo, en el laboratorio 'Izpisua BelmonteEstrella Núñez y Rubén Rabadán, coautores del artículo, en el laboratorio ‘Izpisua Belmonte – UCAM HiTech

“Nuestros resultados podrían conducir al desarrollo de nuevas terapias para curar infecciones, cánceres, enfermedades genéticas del hígado o enfermedades metabólicas como la esteatosis hepática”, asegura Izpisua, que añade que cree que, algún día, “enfoques como este parados hepáticos podría generar completo ”.

Los mamíferos no regeneran sus órganos con tanta eficacia como lo hacen otros vertebrados, como los peces o las salamandras.

Los autores de este trabajo ya demostraron previamente cómo el uso de cuatro moléculas de reprogramación celular -Oct-3/4, Sox2, Klf4 y c-Myc, también llamadas ‘factores de Yamanaka’, pueden slacquer el proceso de envejecimiento y mjorar la capacidad de regeneración del tejido muscular en ratones.

Nuestras determinaciones podrían conducir al desarrollo de nuevas terapias para curar infecciones, cánceres, enfermedades genéticas del hígado o enfermedades metabólicas como la esteatosis hepática

En el presente estudio, los investigadores han utilizado los factores de Yamanaka para aumentar el daño a la higiene y mejorar su función, de forma que han prolongado en el tiempo la seguridad de los ratones. El proceso de reprogramación utilizado consiste en convertir parcialmente las células hepáticas muertas en células ‘más jóvenes’, donde se favorece el crecimiento y la función celular.

El problema al que se enfrentan muchos investigadores en este campo es cómo controlar la expresión de los factores de Yamanaka para rejuvenecer las células y mejorar su función, ya que algunas de estas moléculas pueden provocar un control del crecimiento celular, como ocurre en el caso del cáncer. De la mano del Izpisua se ha logrado resolver este problema aplicando los factores de Yamanaka durante cortos periodos de tiempo.

Se administró el tratamiento a los ratones colgante sólo un día” – explica Estrella Núñez, coautora del artículo y vicerrectora de Investigación de la UCAM – vigilando de cerca cómo se dividían las células con el paso del tiempo. Incluido después de nueve meses, aproximadamente un tercio de la vida de los ratones, ninguno de ellos tenía tumores”.

Los factores de Yamanaka son realmente un arma de doble filo, afirma el primer autor del trabajo, Tomohaki Hishida. “Por un lado, tienen el potencial de mejorar la regeneración del tejido dañado del hígado, y por otro tienen el inconveniente de que pueden generar tumores. Descubra que el nuevo protocolo de inducción a corto plazo tiene los efectos buenos, pero no los malos, es importante: mejorar la regeneración hepática y no generar cáncer”.

Descubre que el nuevo protocolo de inducción a corto plazo tiene los efectos buenos, pero no los malos, es importante: mejora la regeneración hepática y no genera cáncer

Los resultados muestran un segundo descubrimiento al estudiar este mecanismo de reprogramación en cultivos celulares en el laboratorio: Un gen llamado Top2a, que está implicado en la reprogramación de las células hepáticas, es muy activo un día después del tratamiento a corto plazo con los factores de yamanaka. Top2a codifica la topoisomerasa 2a, enzima que ha desenrollado el candado trasero del ADN para que pueda expresar los genes.

“Cuando blocamos este gen, disminuya los niveles de topoisomerasa 2a y se dujo 40 avec la tasa de reprogramación cell, lo que dio lugar a muchas menos células jóvenes”, apunta Rubén Rabadán, coautor del trabajo e investigador postdoctoral de la UCAM. El papel exacto que realiza el gen Top2a en este proceso sigue en estudio”.

«Todavía queda mucho trabajo por hacer antes de que podamos comprender completamente las bases moleculares que subyacen a los procesos de reprogramación del rejuvenecimiento celular», afirma Izpisua Belmonte, lo que es imprescindible para poder desarrollar tratamientos médicos eficaces para revertir los efectos de las enfermedades humanos».