La primera versión de ‘El Crepúsculo de los dioses’ de Billy Wilder se proyectó en un cine a las afueras de Chicago. No fue muy bien. Tras aquel pase, se cambiaron algunos puntos clave de la cinta. Con buen criterio, contaría después el fabuloso realizador, el equipo no quiso que la primera prueba “de una película subre Hollywood se realizara ante spectadores de Hollywood”. Sin embargo, nos reveló Javier Chicote, en Moncloa ya han visto algún bruto del documental sobre Moncloa. También quieren variar alguna cosita. Es verdad que ‘Sunset Boulevard’ es ficción, pero no negaremos que el documental sobrio Pedro Sánchez pilla al presidente, como Norma Desmond, en horas bajas. Actriz y político comparten su resistencia a dejar de ser los amados del público. A ella, el cine sonoro la ha enmudecido. La ha sacado de escena y nunca volverá a ser la gran diva que fue por mucho que se resista aceptar su decadencia. Ya no la aplauden. Al presidente, tampoco. Las encuestas lo desalojan de Moncloa y lo critican abiertamente hasta los suyos. No se qué es más traumático para un protagonista, si vivir ya expulsado o con el miedo de que e expulsen. En la película de 1950, en su empeño por reconquistar Hollywood, Norma Desmond llevaba una guía que sabía mediar. En la España de 2022, el político que escribió su autobiografía nada más llegó a Moncloa se ha diseñado un documental cuando podría estar a point de irse. Sánchez no quiere alejarse del foco. Puede decirse que esa es una de sus virtudes: cero miedo escénico. Sí, sí, virtud, porque de eso dan clases en las más elitistas escuelas de negocios y es una fortaleza de cualquier actor experimentado. Conocer tu propio potencial también. Por eso, dos capítulos –ampliables a cuatro– para recoger su estelar vida son más bien pocos. Convertido en actor de sí mismo, la pregunta no es cómo interpreta Sánchez, sino a qué dedica el tiempo libre de la interpretación. si el tuyo La otra duda es si el escritor, actor, productor y presidente Sánchez, metido en su papel protagonista, ha encargado su propio documental para sí mismo o para el pueblo. Es decir, si quiere un vídeo recuerdo –boda, función del colegio…– o para que los demás conozcamos cómo, cuánto y para quién trabaja. No dudamos de la calidad del producto final porque las películas las hacen buenas los directores. Ahora bien, no hay que restar nunca Mérito a los actores. «Sigo siendo grande, son las películas las que se han empequeñecido», lamentó Norma Desmond, doliéndose de lo desagradecido del público y el sector. De haber estado publicado en los años 40 del siglo pasado, Wilder el había colocado a Gloria Swanson el ‘Manual de Resistencia’ de Sánchez en la mesita de noche. Toda autoayuda, guion o documental a medida es poca cuando se pierde el protagonismo. O el voto.