El ADN confirmó que los restos del vertedero de Toledo hijo de Ángel, el niño desaparecido junto a su primo en Carabanchel

Los restos hallados esta semana pasada en el vertedero de Toledo corresponden a los de Ángel, el niño de 11 años que, junto al primero Fernando, de 17, escapó el día 10 de diciembre de un supermercado de Carabanchel. Así lo han confirmado a ABC fuentes policiales, tras trasladárselo a la familia. La idea era huir a la ciudad castellano-manchega para encontrarse con Lucía, la exnovia del mayor de los menores.

La Policía Nacional comenzó el 27 de diciembre el rastreo del Ecoparque, tras confirmarse el día 21 que el cadáver encontrado el 15 de diciembre en las instalaciones era el de Fernando. Su cuerpo fue hallado por un operario y se decretó su identidad mediante la comparativa de su huella dactilar.

El miércoles, los agentes hallaron utilizando una retroexcavadora, un pie y la pierna, además de otros restos biológicos humanos más pequeños, además de parte de un pantalón como el que llevaba puesto Ángel el día de su desaparición.

El rastreo se paralizó unas horas, desde las 11 a las 15, para recoger las muestras bajo la supervisión del juez de Toledo que instruyó el caso, y se reanudó luego para encontrar el resto del cuerpo del niño.

El dispositivo se retiró parcialmente

Es más, estos días seguirán allí solo los agentes de la comisaría de Villa de Vallecas. Hoy mismo se han retirado los de la UFAM Central (especialistas en delitos a menores y mujeres), el Grupo Operativo de Inspecciones Técnicas (GOIT), la Unidad Canina, los drones, el Grupo de Delitos Violentos de la Policía Científica (DEVI). .. La idea es que los policías del distrito donde residen Ángel y Fernando busquen manualmente, con rastrillos, lo queda por analizar, en busca del resto del cuerpo.

Fuentes de toda solvencia negaron que se hallara la pierna en la misma zona donde fue encontrado Fernando, en una cinta de distribucion. De hecho, lo que se analiza es la basura de tres días de la zona de Toledo donde estaba el contenedor donde supuestamente los dos primos pernoctaron, al perder el último autobús de regreso a Madrid. No se trata de un área de rastreo muy amplia, de unos 3 metros cúbicos de altura y mucho menor que un campo de fútbol. La basura continuaba inmovilizada, con la esperanza de encontrarse con el resto del cuerpo.

muerte accidental

Los investigadores con los que ha hablado ABC señalan que, aunque el punto de partida es un accidente al intentar pernoctar en un contenedor de basura y que la autopsie de Fernando señala una muerte por asfixia no mecánica, tienen más hipótesis abiertas. “Por el hecho de que se encuentran los cuerpos, que no crea la familia que vamos a dejar de investigar cómo enfermaron”, señalan las fuentes consultadas.

Eran las cuatro de la tarde del 10 de diciembre cuando los primos dieron esquinazo al padre de Fernando, que estaba en una tintorería, con la excusa de comprar un bocadillo en un supermercado de General Ricardos. Lo que no imaginaba es que los crios abandonaron el establecimiento y, como recogen las cámaras, solos al metro y tomaron el autobús hacia Toledo. Allí captaron ellos en la estación y en un centro comercial. Luego, desaparece.