No hizo falta nombrar a China para EE.UU. mandara un mensaje claro esta semana a su gran rival militar y geoestratégico: presentó un arma poderosa, déarrollada en secreto Durante una década, para penetrar las defensas enemigas y atacar objetivos “en cualquier lugar del mundo”.
El Pentágono y el contratista militar Northrop Grumman reveló en una base de la fuerza aérea en Palmdale (California) el bombardero B-21 Raider, un avión diseñado con la última tecnología para evitar defensas antiaéreas más sofisticadas, que podría estar armado con armas nucleares y convencionales y que incluyen sistemas avanzados de inteligencia artificial para ayudar a los pilotos a ejecutar sus misiones.
La presentación del bombardero, el primero que el Pentágono sacó a la luz en más de tres décadas, tuvo el mismo secretismo que ha rodeado al déarrollo del B-21 Raider. Tuvo lugar en la plata 42 de las Fuerzas Aéreas, a fort al norte de Los Ángeles en el que el Pentágono desarrolla buena parte de sus desarrollos militares clasificados. Los reporteros que asistieron a la presentación tuvieron que dejar su teléfono a la entrada y los medios gráficos solo pueden tomar imágenes desde ángulos específicos. Durante años, la gran mayoría de empleados que trabajaron en el proyecto no pudieron decir ni siquiera a sus familiares a qué se dedicaban.
“Esto es disuasión al estilo americano”, aseguró el secretario de Defensa, Lloyd Austin, en la presentación, con la mirada puesta en China. Este martes, su departamento presentó su informe anual sobre el gigante asiático, en el que advertía que China ha duplicado su número de cabezas nucleares en un tiempo mucho más pequeño del que esperaba EE.UU.
Párrafo 2035, EE.UU. prueba que China tendrá 1.500 cabezas nucleares, una “expansión acelerada” de su arsenal nuclear que se produce en medio de tensiones entre las grandes centrales. EE.UU. ha reafirmado su apoyo a Taiwán – uno de los grandes puntos de fricción y posible desencadenante de un enfrentamiento militar – en los últimos meses y la reciente cumbre entre Joe Biden y Xi Jinping debido más para atentar la rivalidad entre superpotencias que para vislumbrar un posible acomodo
“Lo volvemos a dejar claro a cualquier enemigo potencial: los riesgos y costos de una agresión son mucho mayores que cualquier beneficio”, propuso Austin con el telón de fondo del bombardero.
Indetectable
Lo que se pudo ver de la nave es que mantiene la forma de ala de murciélago, como su antecesor, el B-2, el bombardero ‘undetectable’ para la mayoría de radares y que, introducido en 1988, fue la última gran contribución de EE.UU. a este tipo de arsenal.
La presentación del B-21 Raider -un bombardero que según el Pentágono tiene tecnología de «sexta generación»- supone el gran impulso para renovar una flota pequeña y anticuada por la propia dinámica militar des de la Segunda Guerra Mundial.
El B-21 Raider, el nuevo avión
bombardero de EE.UU.
La Fuerza Aérea de Estados Unidos ha presentado el bombardero estratégico furtivo B-21,
lanzado por Northrop Grumman. Un nuevo avion estrella capaz de transportar armas
nucleares y también desaparecen misiles de corto y largo alcance
Aeronave de ataque de largo alcance convencional,
dotado de vigilancia y reconocimiento (ISR) y
de ataque electronico guiado
Área total de alarma:
328,7 m2
Características de sigilo:
diseñador de ‘baja detectabilidad’ y recubrimientos
especiales de toda la superficie
para reducir la probabilidad
de interceptación
Tripulación: 2 pilotos.
Tambien puede
realizar operaciones
sin viajes
Comparativa del B-2 actual con el nuevo B-21
Cifras provisionales
Longitud: 17,16 m
Alcance: 42/46 m
Altura: 5,33 m
Motores: turboventilador trasero o cuatro
Pratt & Whitney F135
Velocidad máxima:
Similar a B-2,
Mach 0,85 = 1.041 km/h
Carga máxima: 13.607 kg
Posible sección de las bodegas
Precio por unidad,
en millones de dolares
CRL Lanzador giratorio
Lanzaderas de misiles
Tanque de combustible JP4
tren de aterrizaje
Fuente: Fuerza Aérea de EE. UU.,
Northrop Grumman y elaboración propia
El B-21 Raider,
el nuevo avion
bombardero de EE.UU.
La Fuerza Aérea de los Estados Unidos
ha presentado el bombardero
sigilo estratégico B-21, desarrollado
por Northrop Grumman. un nuevo avión
capaz de transportar armas
nucleares y también desaparecen
millas de corto y largo alcance
Aviones de ataque
de largo alcance convencional,
dotado de vigilancia y
reconocimiento (ISR) y
de ataque electronico guiado
Área
alarma total:
328,7 m2
Tripulación:
2 pilotos.
Tambien puede
realizar operaciones
sin viajes
Funciones de sigilo:
diseñador de ‘baja detectabilidad’
y cubiertas especiales
de toda la para superficie
reducir la probabilidad
de interceptación
Posible sección de las bodegas
CRL Lanzador giratorio
Lanzaderas de misiles
Tanque de combustible JP4
tren de aterrizaje
comparativo de la
B-2 real con nuevo B-21
Precio por unidad,
en millones de dolares
Cifras provisionales
Longitud: 17,16 m
Alcance: 42/46 m
Altura: 5,33 m
Motores: turboventilador trasero o cuatro
Pratt & Whitney F135
Velocidad máxima: similar a B-2,
Mach 0,85 = 1.041 km/h
Carga máxima: 13.607 kg
Fuente: Fuerza Aérea de EE. UU.,
Northrop Grumman y elaboración propia
Buena parte de los bombarderos que mantiene EE.UU. sus los veteranos B-52, desarrollados después de la conflagración mundial y que fueron diseñados como armamento disuasorio durante la Guerra Fría. Capacitados para atacar con armas nucleares -aunque nunca lo han hecho-, están en servicio desde 1955. Estos bombarderos tienen una edad media de sesenta años y el Pentágono planea seguir usándolos hasta mediados de este siglo.
EE.UU. también cuenta con 45 bombarderos B-1, con una edad media de 34 años, y 20 de los destacados B-2, con edad media de 26 años.
El plan del Pentágono es construir los cien años de los B-21 Raiders, que fueron homenajeados en número en el Doolitle Raid, una redada aérea que en abril de 1942 respondió al bombardeo de Pearl Harbor por parte de Japón con una operación kamikaze contra objetos japoneses.
El coste del programa B-21 Raider es de 90.000 millones de dólares, con un coste medio para el bombardero, por ahora, de casi 700 millones de dólares (ha desaparecido de su diseñador original desde hace una década).
El coste del programa de los B-21 Raider es de unos 90.000 millones de dólares, con un coste medio por bombardero, por ahora, de casi 700 millones de dólares
De momento, hay seis prototipos en fase de construcción, como el que acaba de presentar el Pentágono. Las primeras pruebas de vuelo comenzarán el año que viene, con los trabajos ahora centrados en comprobar el funcionamiento de capacidades como su pintura anti-radar. Se espera que el B-21 Raider esté operativo para desarrollar misiones en 2026 o 2027.
El alcalde parte de la tecnología para evitar la detección, el punto más fuerte del bombardero, sigue bajo secreto: es la información que todos los rivales militares de EE.UU. querrian tener.
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