Barcelona da 15 días a Airbnb para eliminar 4.100 anuncios de habitaciones turísticas irregulares

Enésimo encontronazo entre el Ayuntamiento de Barcelona y las plataformas de alquiler de pisos turísticos. Dos días después de que los propietarios de habitaciones anunciaran que retan a Ayuntamiento y vuelvan a colgar anuncios en portales de alquiler, el gobierno de Ada Colau ha anunciado que da 15 días a Airbnb para retirar 4.102 ofertas de habitaciones turísticas sin licencia.

El consistorio mandó este viernes un requerimiento a la plataforma para que desactive todos los anuncios que “no tienen ningún tipo de licencia y, por tanto, se trata de actividad turística ilegal“. En Barcelona, ​​los alojamientos turísticos están regulados por el Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos (Peuat) y que prácticamente no se permite habilitar nuevas. Esta planta, además, una sanción para la plataforma de 60.000 euros si no lo hace.

Para la teniente de alcalde de Urbanismo de Barcelona, ​​Janet Sanz, esta actividad, que en parte está extendida porque este tipo de portales lo permiten, “se tiene que terminar de forma definitiva”. Desde el consistorio recuerdan que en un contexto de «masificación turística y de mucha presión» en los barrios hay qu’guarantezar tanto que los alojamientos de los turistas sean legales, también para su seguridad, como la convivencia y el descanso de los vecinos. »Queremos viviendas para la gente que viva en Barcelona y esta es la prioridad«, sentencia Sanz.

Airbnb, comprometido con la causa

Por su parte, Airbnb ha enviado un comunicado en el que se compromete con la pérdida y en “eliminar la plataforma a quienes no respetan la norma” y que será “buen socio de las comunidades”.

En este, la empresa recuerda que pide a los anfitriones “que comprueben y cumplan con la normativa local antes de publicar anuncios“, y que les ofrezcan una herramienta para que puedan mostrar su número de registro, lo que facilita la labor de inspección e identificación por parte de las autoridades.

En ese, ha recalcado que para “más de la mitad de los anfitriones en Barcelona esos ingresos son claves, especialmente en momentos donde aumenta el coste de la vida“, y que confía en poder trabajar con el Ayuntamiento para encontrar una solución.