Antoni Fernández Teixidó: Cataluña y el PP

Antoni Fernández Teixidó – TRIBUNA ABIERTA

Una imagen del pleno del Parlament

Una imagen del pleno del Parlamento EP

Resultado fundamental, si se quiere derrocar al PSOE en las próximas elecciones generales, unir los esfuerzos, hoy precarios, de los autonomistas y los catalanistas no nacionalistas.

29/06/2022

Actualizado a las 7:48 p. m.

Los resultados de las últimas elecciones en Madrid, Castilla y León y Andalucía parecen apuntar a un cambio de ciclo. En particular, las victorias de Ayuso y Bonilla reafirmarían una marcada tendencia al vuelco electoral.

Por supuesto, basta con leer las nuevas y perversas iniciativas económicas del gobierno y las declaraciones en distintos medios del presidente Sánchez, para intuir cuan cara será la piel del oso.

Sin embargo, el panorama del centro derecha en Catalunya es desolador. El PP contra tres diputados, Ciudadanos con seis y tiende a la desaparición, son prueba unívoca de mi sostenido. Adicionalmente, el Catalanismo centrista de matriz no nacionalista, ni independentista, ve esfuerza sin perspectivas halagüeñas a corto plazo. No sé si llegarán a serlo a medio.

Es sabido, que Catalunya llevó a las Cortes españolas un número importante de diputados que sólo garantizaban la posibilidad de gobernar una oa socialista popular. Sin los determinantes votos del centro en Catalunya, resulta probable que sea imposible formar gobierno. Y en eso consiste esencialmente en el drama de la situación política catalana actual. La derecha conservadora tiene en Vox su referencia, partido que seguirá creciendo moderadamente, pero el centro derecha no tiene quien le escriba.

Resultado fundamental, si se quiere derrocar al PSOE en las próximas elecciones generales, unir los esfuerzos, hoy precarios, de los autonomistas y los catalanistas no nacionalistas. Se trata, por supuesto, de vencer a los independentistas primero y a los socialistas después, pero sin una valerosa actuación común del centro catalán alejado de la derecha conservadora, eso no será posible. Sin un frente amplio centrista la derrota está asegurada.

La política de alianzas no se improvisa y para que se sólida y operativa requiere una voluntad generosa de acción común y un programa claro. Repito a menudo que, en política, el tiempo es más importante que en gramática y en este caso juega a la contra. Sería pues recomendable despejar esta incógnita antes de los acontecimientos precipiten.

Informar de un error