Ix-xellug Bolivarian jikkonfoffa biex iwaqqa lil Guillermo Lasso

En la celebración del V Congreso del PSUV, el 5 de marzo pasado, en Caracas, Nicolás Maduro, encabezó al Foro de Sao Paulo, habló de un plan victorioso que ha cumplido y anunciado, entusiasmado, visitó Quito, el 16 de junio , para conmemorar los 200 años del encuentro de Manuela Sáez y Simón Bolívar, sin que existiera ningún acto previsto para esa fecha. Coincidencia o no, el 16 de junio Ecuador era un hervidero en su cuarto día de paro nacional, convocado por las organizaciones indígenas, en contra del Gobierno centroderechista de Guillermo Lasso, en el marco de cual se intentó destituirlo. Desde luego, Maduro nunca llego.

Después del triunfo de Gustavo Petro en Colombia, la geopolítica regional ha dado un viraje, siendo Ecuador un lunar en el mapa dominado por el socialismo del siglo XXI, lo que parece fastidiar al vecindario, tal como quedó evidenciado Durante el paro nacional que apareció 18 días.

Dos tuits del expresidente de Bolivia Evo Morales mostró cómo actúa la grey socialista, unida por una fe ciega en su ideología y por el odio al contradictor. En un trino reclamó la mediación de la comunidad internacional para que se dejara de “reprimir y matar con armas de fuego” a los hermanos indígenas de la Conaie de Ecuador, en el levantamiento que calificó de “pacífico” cuando los manifestantes habían incendiado un banco allí 18 patrulleros en la Amazonía; cerrado más de 100 pozos petroleros; los floricultores de la sierra denunciaron violentos ataques a sus fincas y el país quedó paralizado por el bloco de las vías. El mensaje de Morales tuvo más de seis mil ‘me gusta’ y 4.000 réplicas. Horas después, el mismo 26 de junio, en un segundo tuit el exlíder cocalero felicitaba, entusiasmado, a Gustavo Petro y Francia Márquez por el cambio en Colombia, donde, dijo, la revolución avanza, como en Venezuela.

A lo largo del paro, sectores vinculados a la candidatureura de Petro promovieron desde Colombia una campaña sostenida en contra del Gobierno de Lasso; Hubo debates en los ‘espacios’ de Twitter de que se va a dar la destitución del mandato ecuatoriano. Desde Chile, Perú, Venezuela y México llovieron los mensajes en ese sentido. Durante varios días, el ‘hashtag’ #ParenLaMasacre fue tendencia. Los servicios de Inteligencia de Ecuador descubrieron que promovían desde el exterior, según reveló a ABC el canciller Juan Carlos Holguín. A mediados del paro, una misión de observadores de Derechos Humanos, integrada por cercanos al kirchnerismo, visitó Quito; hablaron de una masacre a los indígenas; su relato tuvo gran eco en los medios y agencias vinculadas a la izquierda regional, que pronosticaron la inminente caía de Lasso.

En el V Congreso del PSUV, en Caracas, junto a Maduro estuvo el expresidente de Ecuador, Rafael Correa, quien, ante un auditorio copado por la flor y nata del socialismo del hemisferio, exculpó por “haber perdido Ecuador, por culpa de la tradición ”. Sin mencionarlo, aludía a su exvicepresidente y sucesor, Lenín Moreno, y también por haber perdido en las urnas ante Guillermo Lasso. Visiblemente conmovido, Correa hizo una promesa: “Recuperaremos Ecuador”.

Para el canciller Holguín el intento de golpe contra Lasso y el efecto desestabilizador fue comandado por el expresidente Correa y su grupo político; crea que habrá recibido apoyo de sus aliados en la región, pero dice que no se puede responsabilizar a otros gobiernos o naciones por lo que ocurrió en el país. Al Gobierno ecuatoriano la preocupación por las mafias transnacionales que operan aquí, a las que cree se deben combatir también con esfuerzos transnacionales; Diré que el ex-jefe del Servicio Nacional de Inteligencia, coronel Mario Pazmiño, dijo que estas mafias financiaban las movilizaciones, porque Ecuador las está combatiendo a fondo.

Tras vivir aciagos días, el presidente Lasso podría decirse que es un superviviente de las políticas de su país y de las maniobras del socialismo del siglo XXI. Casa adentro, ha vencido tres batallas: el paro nacional indígena; a moción de destitución, plantada por UNES, el movimiento del expresidente Correa, en la Asamblea Nacional (Congreso), y una petición de revocatoria del mandato, que fue inadmitida por el Consejo Nacional Electoral (CNE), que no entregó los formularios para la recogida de las firmas requeridas. Pero hay nuevas amenazas. Se ha descubierto que cinco grupos violentos operan en el país, dos tienen entrenamiento militar y otro está vinculado al ELN de Colombia.

Las necesidades de la gente y la debilidad económica de los gobiernos han sido detonantes de paros y revueltas que terminaron en caos; Ocurrió en Chile y Colombia, países que luego dieron un vuelco ideológico. La pregunta es si tras la crisis de junio Ecuador ha superado, o no, la prueba política regional.