Dewletên Komarparêz ên Dewletên Yekbûyî ji bo mamosteyan hêsantir dike ku çekdar bibin

David alandetePÊKETIN

Dos estados norteamericanos, con una población combinada de 15 millones de personas, está listo para facilitar que los maestros de escuela puedan tener un mayor acceso a las armas para portarlas en clase y defenderse a sí mismos y a los alumnos en caso de asalto. El legislativo estatal en Ohio aprobó una ley — que el gobernador republicano ha dicho que ratificará — que permite a las escuelas adcribirse un programa para entrenar a profesores en el manejo de armas durante 24 horas o menos, y facilitarles llevarlas en las aulas. El congreso regional de Luisiana ha enmendado una ley para permitir que los maestros porten armas en las aulas.

Estas medidas llegan después de varias masacres encadenadas, la más reciente en una escuela de primaria de Texas en la que un joven de 18 años mató a 19 jóvenes y dos profesores.

El jueves por la noche, el presidente Joe Biden fue a la nación para pedirle que presione al Capitolio y que apruebe leyes más estrictas con respecto a la tenencia de armas. Los republicanos, sin embargo, han defendido mayor seguridad en las aulas y, en algunos casos, armar a los maestros, algo que ya defendió al expresidente Donald Trump tras otra matanza escolar en Florida en 2018.

Los legisladores republicanos en Ohio enviaron al gobernador, Mike DeWine, una nueva ley que permitía a las escuelas autorizar a los maestros a llevar armas, tras un programa de entrenamiento de apenas 24 horas de duración, o menos. Hasta ahora, un programa similar duró 700 horas. El gobernador DeWine indicó en un comunicado que la ley sería ratificada. “Agradezco a la asamblea que haya aprobado este proyecto de ley para proteger a los niños a los profesores de Ohio”, dijo. Importantes sindicatos policiales y profesores se han opuesto a esta ley estatal, además de los demócratas.

El mismo miércoles, el Senado de Luisiana, estado controlado también por los republicanos, enmendó un proyecto de ley sobre tenencia de armas para facilitar que los maestros y gerentes de las escuelas las lleven consigo, y que además no tengan que ocultarlas. En su versión modificada, el proyecto de ley autorizaría a los distritos escolares a nombrar lo que describiría como “funcionarios de protección escolar”, que tendrían que realizar un curso de formación y obtención de un permiso para llevar armas en la escuela. Esa ley ahora al pleno del Senado, y de ahí a la Cámara, antes de llegar al despacho del gobernador.

En el caso de la reciente matanza de Texas, la escuela tenía en pleno un sistema de protección, con unas alarmas a la policía, que intervino demasiado tarde como para salvar a los niños. El asesino encerró en la escuela, sita en la localidad de Uvalde, y mató sin impedimentos durante aproximadamente una hora, según relatos posteriores. Las autoridades han abierto una investigación.