HardTalk & Kyle Bass 1 de 2 en La economía mundial
La crisis hipotecaria española ha dado lugar a un proceso masivo de desposesión de viviendas mediante ejecuciones hipotecarias. Este proceso forma parte de las lógicas de acumulación por desposesión apoyadas por el modelo financiero e inmobiliario español. El artículo utiliza la ciudad de Lleida como caso de estudio para mostrar que los efectos de este fenómeno no han tendido a ser espacialmente homogéneos, sino que se han concentrado más en las zonas urbanas más desfavorecidas.El análisis se ha centrado en dos enfoques: (1) identificar las características de las viviendas afectadas por los procesos de ejecución hipotecaria que han dado lugar a desahucios, y; (2) definir los patrones de distribución espacial de estas viviendas. Este trabajo demuestra cómo los desahucios por ejecuciones hipotecarias han seguido unas pautas muy claras. En primer lugar, se han centrado predominantemente en las viviendas de menor calidad (identificadas en este estudio como las más baratas y de menor tamaño). En segundo lugar, se ha utilizado la estadística espacial Getis-Ord Gi* para mostrar que se han concentrado en las zonas más desfavorecidas de la ciudad. Ambas cuestiones confirman la hipótesis central de nuestro estudio: la crisis hipotecaria española ha exacerbado las disparidades urbanas existentes.
Crisis de la vivienda en España
Europa vuelve a la carga. Tras sufrir la peor crisis financiera y económica de los últimos 80 años, Europa ha tomado medidas decisivas para mejorar sus finanzas públicas, impulsar reformas profundas y establecer nuevas instituciones para gestionar y prevenir mejor las crisis. Los cambios son estructurales, duraderos y hacen a Europa más competitiva. Europa es más fuerte, está mejor equipada y se encuentra en medio de nuevas y ambiciosas iniciativas financieras y económicas.
La crisis mundial golpeó a Europa dos veces. El primer golpe vino del exterior en 2007. En Estados Unidos, los mercados habían ignorado el riesgo crediticio en los mercados hipotecarios de alto riesgo. La falta de supervisión financiera permitió que florecieran instrumentos financieros opacos, agravando el problema. Como resultado, el sistema bancario estadounidense sufrió un dramático rescate en septiembre de 2008. Los bancos europeos sufrieron las consecuencias. Dos años después, estalló una segunda crisis en la zona del euro. Años de políticas gubernamentales insostenibles habían provocado que los déficits y las cargas de la deuda se dispararan y que los salarios y los precios de la vivienda anteriores a la crisis se inflaran. A medida que la situación se agravaba, Europa tomó decisiones valientes para volver a poner al continente en pie de igualdad.
The Big Short Anthony Bourdain explica CDO
La crisis económica que afectó al país en 2008 no puede separarse de la posterior crisis financiera. Para contextualizar los juegos bancarios que informan los próximos capítulos y para entender las consecuencias generales que la crisis económica tuvo en los bancos y cajas españoles, este capítulo examina la crisis económica y analiza sus causas y consecuencias. Una vez más, el rendimiento del sistema bancario español estuvo profundamente relacionado con el rendimiento de la economía española, y el progreso del sector bancario se vio empañado por el rendimiento de la economía española en general. La crisis económica iniciada en 2008, que forma parte de la gran recesión en la que se vieron envueltos la mayoría de los países, tuvo profundas consecuencias para el sistema bancario español. Este libro mostrará que las crisis financieras fueron el resultado de un acuerdo político en el que los incentivos y un marco regulatorio laxo favorecieron a promotores, propietarios y banqueros, confirmando así un inquilino central: la importancia crucial de las instituciones políticas domésticas, las reglas del juego y el papel de los actores domésticos que operan dentro de esas instituciones.
¿Ha comenzado la caída de China?
En 2008 la crisis financiera golpeó a las economías modernas. Sin embargo, no todos los países se vieron afectados de la misma manera. Si nos centramos en España, la tasa de desempleo en 2013 era de casi el 23%. Esta situación tan delicada desencadenó grandes dramas sociales. El más conocido de estos problemas sociales en España es el desahucio. Hablamos de desahucio cuando las entidades financieras obligan a una familia a abandonar su casa por no pagar la hipoteca. Hasta ahora, otros países europeos proceden de la misma manera. La particularidad de España es que los desahucios no cancelan las deudas, por lo que las familias deben pagar sus hipotecas aunque hayan entregado la casa al banco. El peor año fue 2010, con 93.636 familias desahuciadas de sus casas. Es decir, más de 10 familias al día fueron desahuciadas. Este drama social afectó principalmente a las clases sociales medias y bajas. A estas alturas y después de observar estos datos, cabe preguntarse, ¿por qué ocurrió esto? ¿Por qué los bancos concedieron hipotecas a agentes insolventes? ¿Por qué las instituciones no se dieron cuenta de nada?