Como solicitar la extinción del condominio sobre una propiedad

La extinción del condominio sobre una propiedad debe solicitarse cuando se enfrenta cualquiera de las siguientes situaciones: una pareja que tiene una vivienda en común se separa formalmente y no se sabe cómo repartirla o cuando los herederos de un inmueble no tienen claro cómo dividirlo.

Si quieres entender un poco más que es y como solicitar esta extinción, continúa leyendo y entérate de todos los detalles que necesitas.

¿Qué es una extinción o disolución del condominio?

Comencemos indicando que esta forma práctica de dividir un condominio está regulada por los artículos 400 y 406 del Código Civil. Desde un punto de vista legal, un condominio, una comunidad y una copropiedad es lo mismo, cuando un matrimonio compra un inmueble familiar, ambos miembros son copropietarios y lo más común es que la propiedad se reparta al 50% en el caso de que haya una separación. De forma similar, si cuatro hermanos hereden una vivienda, cada uno se quedará con un 25%.

La extinción del condominio es entonces una solución clara en el caso de que la pareja separada o los hermanos herederos deseen repartirse el inmueble y de esta manera, terminar con la comunidad de bienes. Este proceso da lugar a que una de las partes ceda la propiedad de la vivienda a la otra sin o con hipoteca.

La extensión del condominio es similar a la compraventa, pero con la ventaja de que se pagan menos impuestos. Así es, el propietario que cede su parte será compensado económicamente por aquel que adquiere el bien inmueble.

¿Cómo solicitar la extinción del condominio?

Solicitar esta extinción es muy sencillo, ya que una vez que se han hecho las negociaciones y las partes están de acuerdo, todo se resume en algo similar a acudir al notario y firmar una escritura de compra-venta.

Si estamos hablando del trámite de un matrimonio, también es posible optar por hacer la extinción usando el Convenio Regulador de mutuo acuerdo que acompaña a la demanda de divorcio, ya que este convenio puede dar lugar a la extinción del condominio por voluntad mutua.

¿Cómo es la fiscalidad de la extinción del condominio?

Como se mencionó antes, generalmente hay una compensación económica al que cede su parte. Aunque esto no indica que recibirá dinero. La fiscalización comienza con el tributo por Actos Jurídicos Documentados, que es entre el 0,5% y 1% sobre el valor real de los bienes adjudicados.

Toma en cuenta que si la persona que otorga su parte recibe más dinero de lo que vale, debe tributar por ese incremento de patrimonio en el IRPF.

¿Qué pasa si hay hipoteca?

Si el inmueble fue adquirido mediante un préstamo hipotecario, se presenta un problema al momento de solicitar la extinción del condominio sobre la propiedad. En este caso uno de los divorciados puede pactar adquirir el 100% del inmueble, pero el banco no acepta quitar a uno de los deudores del contrato, así que la extinción de condominio afirma la pérdida del bien pero no la deuda hipotecaria.

Cuando una propiedad está hipotecada, hay que tomar en cuenta siempre la tercera parte vinculada en el proceso de extinción del condominio: la Entidad Bancaria. Y al hacerlo muchos han notado debilidades en el régimen legal hipotecario.

Para que alguno deje de ser propietario y deudor, debe aprobarse un nuevo préstamo hipotecario en el que la persona que sede no sea más un deudor, quedando satisfechas ambas partes. Esto se logra gestionando una nueva hipoteca a nombre del nuevo propietario en el momento de la firma en notaría.

Cuando la extinción de condominio se hace usando el Convenio Regulador, no es posible lograr el acuerdo antes indicado, por lo tanto debe acudirse a la entidad bancaria y solicitar la posibilidad de que la hipoteca quede a nombre de un titular.

Al consultar el proceso en el banco y solicitar la desaparición de un titular de la deuda, ya debes llevar algunas posibles alternativas, como aceptar otro titular o sustituirlo por avalistas solventes.

Es importante en este tipo de procesos conseguir el asesoramiento adecuado de abogados competentes, economistas y si es necesario expertos hipotecarios.